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Ramon Tèrmens nos cuenta las anécdotas del rodaje de 'La dona il·legal'

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Eduardo de Vicente

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Ramon Térmens es un interesante realizador catalán con una filmografía muy valiosa que, sin embargo, es poco conocida por el gran público. Está compuesta por cuatro títulos muy diferentes que merecieron mejor suerteJoves (tres historias cruzadas que trazaban un afilado retrato de la juventud), Negro Buenos Aires (sobre un ejecutivo catalán que viaja a Argentina para hacer negocios), Catalunya über alles! (la integración en la Catalunya interior) y el violento thriller El mal que fan els homes. Ahora llega a las pantallas su nuevo trabajo que, probablemente, sea el más redondo, el drama La dona il·legal. Está protagonizada por su actor fetiche y coguionista, Daniel Faraldo, Isak Férriz, Montse Germán y la gran sorpresa, Yolanda Sey, una de las componentes del grupo musical Sey Sisters.

La trama se centra en un abogado que se desvive para ayudar a sus clientes, en su mayoría, emigrantes con problemas para conseguir papeles mientras intenta sobrellevar la enfermedad de su mujer. Todo se complica cuando una colega le pasa el caso de una joven kosovar que va a ser deportada y que, poco después, aparece muerta en un Centro de Inmigración de Extranjeros (CIE). Se niega a aceptar la versión oficial de que ha sido un suicidio y entra en contracto con una prostituta, amiga de la fallecida. Su investigación le llevará a descubrir ocultos asuntos que harán que se enfrente al sistema.

Es un drama que mira de frente el problema de la emigración escondido bajo una historia de intriga. Pero también es un homenaje a todas esas personas que luchan por ayudar a los demás y denunciar los abusos del poder. Una película que respira verdad por todos sus poros y que tiene un desenlace de aquellos que conmueven y emocionan. Para saber más sobre las curiosidades del rodaje hemos invitado a su director, Ramon Tèrmens, a que nos las explique.

-De una reunión de padres al plató. “El origen de la película fue casual. Todo empezó en un encuentro de padres en la escuela de mi hijo durante unas Navidades. Hablando sobre cómo cada uno se ganaba la vida, yo comenté que "hacía películas". Entablé conversación con el abogado Ferran Villuendas, que se dedica a lograr los papeles para inmigrantes en situación irregular. Le hablé de una película anterior que hice ("Catalunya über alles!"), que trataba sobre el racismo, y ahí empezó una correspondencia vía mail por la cual me contó casos bastante complicados que se había encontrado en el ejercicio de su oficio. Me pareció que ahí había una película. Lo hablé con mi guionista habitual Daniel Faraldo, quién se entusiasmó en el acto, y más teniendo en cuenta que a la presidencia de los EEUU acababa de llegar Donald Trump y Daniel vive en Los Ángeles”.  

-Un permiso muy oscuro. “En la primera escena de la película, un inmigrante subsahariano le explica a su abogado, Fernando Vila (interpretado por Daniel Faraldo), que la policía le detiene cada vez que enseña su permiso de residencia porque la foto de su cara está "muy oscura" y no lo pueden identificar. Esa historia es real, y lo iba a interpretar el propio inmigrante (un cliente del abogado real), pero el día del rodaje no se presentó y no lo pudimos localizar. Tuvimos que encontrar un actor en pocas horas para que hiciera el papel”.

-Un guardia civil ¿actor? “Una historia difícil de creer es que, previamente al rodaje, fui una noche al prostíbulo dónde íbamos a rodar el filme para verlo en acción. Iba con el guion, tomaba notas y apuntaba planos mientras observaba con mi visor de director los posibles encuadres. Lo hice de la forma más discreta posible por razones obvias. Aún así, de repente, se aproximó un cliente del lugar y me preguntó si estaba preparando una película. Le contesté afirmativamente (ignoro si se había corrido la voz) y entonces me dio su nombre y apellidos. Seguidamente me contó que era guardia civil y que le encantaría aparecer en el filme. Le di el contacto de mi director de casting...”

-Gorka o nadie. “Tengo que reconocer que, a veces, me empecino en las cosas de una manera casi irracional. Pero suelo salir bien parado y la obstinación vale la pena. Esto viene al caso de que quería para interpretar el papel del macarra Jordi Puigmartí al actor Gorka Lasaosa. Era nuestro reencuentro después de que Gorka debutase en Joves. Posteriormente ha hecho una buena carrera y se ha convertido en un actor magnífico. El problema es que Gorka estaba en México rodando Narcos para Netflix y el rodaje era casi por las mismas fechas. Además constantemente le cambiaban el plan de rodaje. Yo quería sí o sí que fuese Gorka y desoía una y otra vez las recomendaciones razonables del equipo para que buscase un plan B o C. Con el rodaje ya empezado, Gorka acabó aterrizando un domingo y el lunes ya filmaba en el set del prostíbulo. Si le hubiesen cambiado de nuevo el plan de rodaje y no hubiese podido volar quizás no me hubiese quedado otro remedio que contratar a ese cliente que se me ofreció…

-De la ficción a la realidad. “Uno de los momentos fuertes que viví ocurrió cuando, rodando en la antigua cárcel de La Modelo, estaba explicando la escena que íbamos a rodar con un grupo de figurantes que iban a hacer el rol de prostitutas detenidas y encarceladas. En ese momento, una de ellas empezó a llorar. Después de tranquilizarla, me acerqué a la directora de casting de la figuración preguntándole si quizás yo había dicho algo incorrecto. Ella me dijo que no, que simplemente Dodo F. Tobi se había emocionado al recordar la vez que ella misma estuvo encerrada en un CIE y pensaba que la deportarían dejando atrás un bebé recién nacido. En ese momento se me ocurrió poner testimonios reales en los créditos de la película y uno de ellos es la propio Dodo que cuenta, con mucha emoción, su terrible caso”.

-De script a actriz. “En la introducción hay una estudiante mexicana que explica su caso al abogado. Esa estudiante era, en realidad, la script de la película que, efectivamente, era mexicana. Mientras rodábamos le hice la broma en el combo de que saliera ella e hiciera un personaje. Para mi sorpresa Daniela García, la script, dijo que sí y, sin avisar a Daniel, apareció en el set e hizo un personaje totalmente improvisado. Daniel estuvo magnífico siguiéndole la corriente”.

-¿La actriz que canta o la cantante que actúa? “Una de las particularidades de las que más satisfecho estoy de la película es del debut cinematográfico de tres actrices sensacionales: Yolanda Sey, Adeline Flaun y Raquel Camón. Animaría al lector a que fuese a ver la película tan solo para disfrutar de las interpretaciones de todas ellas. En el caso de Yolanda, tuvo que pasar por un casting  bastante duro en el cual había una competencia muy fuerte. Se da el caso que Yolanda es miembro del estupendo grupo The Sey Sisters junto a sus hermanas. Se me ocurrió que en una escena de la película, en la que el personaje de Oriol Cadenas (interpretado por el genial Isak Férriz) está en un bar pensando en el personaje de Juliet Okoro (Yolanda Sey) sonase en el local como música diegética una canción de The Sey Sisters, dando lugar a un guiño meta-cinematográfico, (lo que no acostumbro a hacer habitualmente). La canción elegida (Believe) es pura ironía con lo que está realmente sucediendo. Y hasta aquí puedo contar para no caer en spoilers”. 

-El actor trompetista. “Daniel Faraldo siempre pide (y hace bien) un lugar privado para poder concentrarse en su personaje y estar tranquilo mientras se hacen los preparativos previos a la filmación de una escena. Para inspirarse decidió tocar la trompeta. Cuando su lugar privado estaba alejado no había problema, pero cuando estaba cerca del set todo el equipo podía disfrutar del concierto. Si bien se esforzaba, Miles Davis no era”.

-Pedro Sánchez paró el rodaje. “Un hecho realmente insólito sucedió el día que rodamos el interior del avión en el aeropuerto de Alguaire de Lleida. El aeropuerto no tiene precisamente el tráfico aéreo del John Fitzgerald Kennedy de Nueva York y preveía un rodaje tranquilo. Y así fue mayormente hasta que surgió el rumor que quizás ese día (precisamente ese día) aterrizaría en el aeropuerto de Alguaire el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Al final, el rumor resultó ser cierto. Y vino la guardia civil a pararnos el rodaje para que pudiese aterrizar el presidente (ignoro las posibilidades matemáticas de que una cosa así pueda suceder)”. 

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