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Dos grandes retratos de mujer coinciden en la cartelera de cine

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Eduardo de Vicente

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La cartelera de cine nos ofrece estos días la posibilidad de disfrutar de dos excelentes retratos femeninos. Se trata de dos mujeres muy distintas en cuando a edades, nacionalidades, problemas y objetivos vitales. Pero ambas películas coinciden en algo, diseccionan perfectamente a las dos, muestran sus sueños y sus ansias de libertad y las interpretaciones de las actrices que las encarnan han sido merecedoras de diversos premios. De Argelia a la Antártida pasando por Estados Unidos, de una joven a una mujer madura. Conozcámoslas un poco mejor: son Papicha y Bernadette.

Una joven frente al radicalismo

La primera es Papicha, una joven estudiante árabe que vive en la Argelia de los años 90 y ve cómo el radicalismo va creciendo en su país mientras ella tiene una visión más moderna del mundo. Es muy hábil combinando telas y sueña con ser modista por lo que decide montar un desfile de modas en la universidad utilizando únicamente haikas (vestido tradicional que consiste en una larga pieza de tela que se puede enrrollar de diferentes formas).El filme es una denuncia de la situación de regresión que se vive en algunos países árabes donde las mujeres no pueden realizarse como desearían.

Papicha, sueños de libertad es el primer largometraje de ficción firmado por la directora Mounia Meddour, que es la esposa de Xavier Gens, realizador de Hitman o La piel fría, adaptación de la novela de Sánchez Piñol. La cineasta aclara que el filme está basado en hechos reales pero es una interpretación libre de los mismos. La película contrasta la situación de la protagonista, una chica culta, con una buena educación, como sus amigas, que vive en el campus, con la de otras que le reprochan su desvergüenza o el machismo de los hombres, que solo se preocupan por someterlas.

La película también aborda el tema del aborto, el terrorismo o el auge de los talibanes, que le declaran la guerra a la cultura y al conocimiento con la complicidad (bien sea por temor o por convencimiento) de parte de la población. Destaca poderosamente la interpretación de su protagonista, la desconocida Lyna Khoudri (ganadora del César a la mejor actriz promesa), que sabe transmitir tanto el entusiasmo como la angustia de su personaje. Sufres continuamente por ella, envuelta en un entorno intolerante, pese a lo cual se niega a abandonar su país y opta por luchar aunque su vida corra peligro.

Una arquitecta que ha perdido el rumbo

Al otro lado del mundo, en Seattle, se encuentra Bernadette, una mujer de mediana edad algo neurótica que ve su vida alterada a partir del momento en el que su hija adolescente le pide a ella y a su marido, un experto en nuevas tecnologías, que hagan realidad su sueño de viajar los tres a la Antártida. La pareja acepta, pero en el fondo, ella desea encontrar una excusa para evitarlo. Es un análisis de un personaje sumamente complejo, el de una brillante arquitecta que, por una serie de razones, se desengañó de su profesión y se ha convertido en una mujer inestable, poco sociable, que odia a la gente, excéntrica y algo agresiva. A medida que va transcurriendo la acción vamos descubriendo sus motivos.

¿Dónde estás, Bernadette? es el último trabajo del prestigioso Richard Linklater (realizador de la trilogía Antes del amanecer Boyhood) y es una comedia dramática protagonizada por Cate Blanchett con Billy Crudup (visto en El buen pastor y Spotlight), Kristen Wiig (La boda de mi mejor amiga) y la debutante Emma Nelson. Cate Blanchett (nominada al Globo de Oro a la mejor actriz por este trabajo) brilla como nunca ya que su personaje debe pasar con soltura de registros dramáticos a cómicos. Y sorprende porque, aunque solo sea en determinadas escenas, demuestra tener mucho talento para la comedia, género en el que no se ha prodigado demasiado.

La película habla también del contraste entre la tecnología y la naturaleza y de gente muy humana, con sus virtudes y defectos. Otros personajes son las localizaciones: la ciudad de Seattle de la que muestra, por ejemplo, su espectacular biblioteca o un restaurante giratorio y, sobre todo, los impresionantes paisajes de la Antártida. Un filme muy especial, inteligente y original que alterna con facilidad la comedia, el drama e incluso una trama de intriga para acabar siendo casi de aventuras. Su conclusión es que un artista ha nacido para crear y debe seguir haciéndolo para poder mantener el equilibrio. Dos estupendas propuestas cinematográficas con nombre de mujer.