'Te veo': mejor no creer a los ojos

El prólogo de 'Te veo' es de impacto: un chaval de 10 años recorre los bosques en bicicleta hasta que, de la nada, es sacudido por una aparente fuerza invisible, casi como los abducidos de la injustamente olvidada 'Misteriosa obsesión' del 2004.  

Este arranque predispone al espectador para cierta clase de película. Tiñe de posibilidades espectrales la investigación de la muerte del chico, así como la extraña vida doméstica del detective Greg Harper (Jon Tenney), que pasa por momentos complicados con su mujer, Jackie (Helen Hunt), después de que esta tuviera una relación extramatrimonial. El hijo adolescente de ambos, Connor (Judah Lewis), no parece dispuesto a perdonar. 

Dar otros detalles sobre el argumento arruinaría la experiencia de 'Te veo', en la que el director Adam Randall ('iBoy'), bien servido por el guion de Devon Graye, consigue mantener alerta al espectador a pesar de ciertas carencias en diálogos e interpretaciones. No es tan habitual ver una película haciéndose preguntas del tipo: ¿qué estamos viendo? ¿Este detalle implica algo? ¿Dónde estamos ahora? Y que esas dudas sean consecuencia de un plan bien trazado, que no de un problema de indefinición. 

La película de Randall bascula entre diversos géneros, del thriller al drama familiar, pasando por el terror, un terreno en el que brilla especialmente, en parte por la extraña eficacia de cierta máscara de rana. Seguirán viendo esos ojos en sus sueños.