D'A FILM FESTIVAL

'La reina de los lagartos': el E.T. que no se va

Burnin' Percebes revisan el mito del buen extraterrestre en 'La reina de los lagartos', miniatura inclasificable con Bruna Cusí y Javier Botet

Bruna Cusí y Javier Botet, en ¿La reina de los lagartos¿

Bruna Cusí y Javier Botet, en ¿La reina de los lagartos¿

Juan Manuel Freire

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Los hay que buscan comodidades y los hay que buscan trascender sus propios límites, jugársela bien jugada. Burnin' Percebes son del segundo grupo. Tras hacerse un nombre en el (pos)humor de Internet y aportar pequeñas joyas al cine 'low cost' más hiperconectado, el dúo formado por Fernando Martínez Juan González reescribe su libro de estilo en 'La reina de los lagartos', una de las películas más gozosamente únicas del catálogo de este D'A Film Festival.

De entrada, los Burnin' ya no rodaron en digital, sino en Super-8, a pesar de las advertencias de amigos y conocidos. "Todos nos decían: 'pero, ¿por qué queréis rodar en Super-8?'", explica González entre risas. "Sincronizar el sonido es un follón, igual ni siquiera sale bien, os metéis en un buen jardín…". No era una opción fácil ni tampoco especialmente barata. "Cada bobina te da unos tres minutos y veinte segundos, de los cuales, si quitas las colas, te quedan tres minutos escasos, dice Martínez. "Entre el precio del cartucho, el revelado y demás, cada tres minutos te salen a unos 80 euros". Ellos acabaron usando treinta bobinas en una primera fase y quince en la segunda. "Íbamos muy pillados".

Lo más lógico habría sido llegar al rodaje con todo bien ensayado, pero el espíritu de 'La reina de los lagartos' se basa en la improvisación. Si pones juntos a Javier Botet como extraterrestre desorientado y a Bruna Cusí como su algo exhausto ligue terrestre, la magia sale sola. (Fernando): "Con Javier, la directriz siempre era: 'Sobre todo, no digas las cosas de forma diferente a como las dirías tú mismo'. Del contraste entre su forma de hablar, algo trabajosa, con la dicción perfecta de Bruna, tan de escuela de Barcelona, surgía un baile curioso".

La primera toma era, generalmente, la que iba a la película. "Pero eso tampoco se distingue mucho de nuestro trabajo en digital", avisa Juan. "Solemos funcionar así. En la toma única aparece la pureza que siempre estamos buscando. Solo repetimos cuando algo ha quedado realmente mal y es insalvable".

Y la nave no viene

'La reina de los lagartos' nace de las cenizas de un proyecto de instalación sobre una mujer que pare un lagarto en un pueblo. También del afán de hacer algo en Super-8. Y de poder trabajar más tiempo con Cusí, con quien ya contaron en una escena de 'IKEA 2'. Pero, sobre todo, nace como respuesta a la inquietante pregunta: ¿qué pasaría si E.T. se quedara en la Tierra y entonces fuera un agobio? "Imagina –explica Juan–que al final Elliott y su madre tienen que cuidar de él, darle comida… E.T. sería una persona que no podría encontrar trabajo ni aportar nada económico a la familia. Todo lo que molaba de E.T. poco a poco se iría perdiendo".

Los Burnin’ revisan el mito del extraterrestre bueno por medio del costumbrismo y la obscenidad (Robert Mapplethorpe habría sido fan), el delirio y, por qué no, una emoción extraña. La misma música procesional que a veces induce a la sonrisa puede cargar de congoja en otra escena. (Fernando): "En papel teníamos la fantasía de hacer algo en Super-8 con música mákina. Tras la primera tanda de rodaje, cuando empezaron a llegar los materiales, vimos que la mákina se descartaba. Además, desde hace tiempo teníamos la fantasía de hacer una película orquestada, como los grandes directores. Esto es como una versión casera de eso".

Fernando y Juan no han salido escarmentados del proyecto, sino que plantean la posibilidad de volver al Super-8. En realidad no se cierran a ningún formato, género ni subgénero. Su periodo de confinamiento ha sido bastante fructífero, al parecer. "Bastante digno", asegura Juan. "Hemos hecho mucho Skype, hemos trabajado bastante, pero sin presiones. También ha habido tiempo para perder".

Aunque lamentan la imposibilidad de presentar la película en vivo en el D'A, uno de sus festivales de referencia, reconocen que el viraje online puede representar una oportunidad. (Fernando): "Aunque pierdas el contacto con el público, te abres a todo el panorama nacional. Tu película se va a poder ver mucho más durante esos diez días. Nos parece guay que el D'A, en lugar de desaparecer, como otros festivales, haya ofrecido esta alternativa".