ESTRENOS DE CINE DE LA SEMANA

'Rojo': cine negro y crónica social en la Argentina de los 70

El director Benjamín Naishtat viaja a la Argentina previa al golpe de estado de 1976 en el premiado y estilizado 'thriller' 'Rojo', que llega este viernes a nuestros cines

Andrea Frigerio, Laura Grandinetti y Darío Grandinetti, en un fotograma de 'Rojo', de Benjamín Naishtat

Andrea Frigerio, Laura Grandinetti y Darío Grandinetti, en un fotograma de 'Rojo', de Benjamín Naishtat / periodico

Beatriz Martínez

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Casas que de un día para otro quedan deshabitadas, gente que comienza a desaparecer, irascibilidad en el ambiente, tensión, miedo. El director Benjamín Naishtat quería aproximarse a ese momento en el que todo estaba a punto de saltar por los aires, justo antes del golpe de estado en Argentina del 76 para hablar de la violencia soterrada, del silencio y el germen del horror. Pero no pretendía hacer una película exclusivamente política, sino que todo ese contexto se colara de forma imperceptible por las rendijas de un relato orquestado en clave de thriller.

El resultado es ‘Rojo’ un noir inclasificable, estilizado y repleto de ambigüedad que se convirtió en la gran sorpresa del pasado Festival de San Sebastián, donde consiguió tres premios: mejor director, mejor actor (Darío Grandinetti) y mejor fotografía.

“Me interesaba adentrarme en esa etapa del Tercer Peronismo, cuando Isabel Perón toma el poder y ya comienza a gestarse el aparato opresivo. Un momento histórico en el que germinaba el mal y la gente reaccionaba sin saber muy bien qué está ocurriendo a su alrededor”, cuenta el director Benjamín Naishtat desde Buenos Aires. Como si un monstruo pululara por el ambiente, se escondiera y no lograras ponerle rostro, pero sabes que está ahí, acechando. Así es ‘Rojo’.

El director quiso ambientar la historia en una pequeña comunidad que le sirviera como microcosmos para analizar las relaciones de poder que se establecen entre los personajes en una época en la que no paraban de sucederse las sospechas y guardarse los secretos. Allí vive Claudio (Grandinetti) un respetado abogado acostumbrado a mirar a la gente por encima del hombro. Un día se está esperando en un restaurante a su mujer cuando un hombre le increpa y él se encarga de ponerlo en ridículo delante de todo el mundo. Meses más tarde, un detective privado, Sinclair (Alfredo Castro) aparecerá para resolver un caso de desaparición.

Diferentes formas de expresión

“Mi cine ha ido cambiando y yo mismo he buscado otras formas de expresión. Quería utilizar el noir, los códigos del filme investigación para poder así dialogar mejor con el espectador. Los géneros son un fantástico vehículo para contar historias”. Pero ‘Rojo’ no es un thriller al uso. Además del subtexto histórico encontramos toques comedia negra y de wéstern. Los dos contrincantes resultan tan diferentes como la técnica que utiliza cada intérprete para encarnarlos. “Grandinetti es más cerebral, Castro más físico. Uno más contenido y el otro más expansivo. Y el choque es una bomba”.

El director estaba escribiendo el guion cuando se produjo un eclipse y todo se tiñó de rojo. Le pareció una sensación tan extraña que decidió integrar esa experiencia en la película y ponerleel nombre de un color que, de una u otra manera, lo impregna todo.