'El carnaval dels animals': un cuento con música clásica, beat box y acrobacias

El carnaval dels animals es un perro verde en la trayectoria del compositor romántico francés Camille Saint-Saëns. Una parodia musical en la que aprovechaba para reírse de todo y de todos con la excusa del tema citado, una fiesta animal, y en la que introdujo incluso fragmentos de temas propios (como la Danza macabra) o ajenos (como el Can Can). Pero el artista, cuyas piezas habituales tenían un tono mucho más serio, decidió, tras algunas interpretaciones privadas, que no pudiera ser utilizada hasta después de su muerte. Curiosamente, a partir de ese momento se convertiría en una de sus obras más populares hasta el punto que sus últimas notas (Final) formaron parte de Fantasía 2000, la nueva versión del filme animado Disney que combinaba música clásica y dibujos, representada por unos juguetones flamencos.

La obra da mucho de sí y de ello se han dado cuenta los Brodas Bros, el imaginativo grupo de hip-hop y danza urbana que ya sorprendieron recientemente con su adaptación del cuento de Pere i el llop con música de Prokófiev en colaboración con la Orquestra Simfònica del Vallès. Y ahora han decidido dar un paso adelante más y hacer una relectura, respetuosa pero llevándola a su estilo, de El carnaval dels animals. Por ello se ha añadido a este dream team un guionista, el escritor, actor y director Iván Morales (El cor de la ciutat, Gran Hotel) para que cree una historia que sirva de vehículo. Trabajar con una dramaturgia propia más sólida.

El oso que se movía a cámara lenta

El espectáculo está dirigido a los niños y se centra en un protagonista con el que nos podemos identificar fácilmente, una especie de Charlot o Buster Keaton. Nos explica la trama el propio autor, Iván Morales. “Se trata de Phax, un oso muy tranquilo que se mueve como a cámara lenta y que vive en el zoológico de Nueva York.  Pero los malvados hermanos fósiles lo secuestran para venderlo en el mercado ilegal de animales especiales a coleccionistas privados. La narradora (Carla Tovias) y el público (que tendrá varios momentos para participar) debe conseguir que logre escapar. Pero va a parar a un bosque fantástico donde los animales preparan un carnaval cuyo acto principal es una danza para escoger a su futuro rey. Phax se siente desplazado, ha sido criado en cautiverio, no está preparado para relacionarse, pero siempre ha soñado ser libre. No sabe qué hacer ni se siente integrado pero luchará para lograrlo aportando su particular perspectiva. El mensaje que lanza es el de aceptar la diferencia y cómo ejercer la libertad”.

Morales reconoce que su sueño “es poder hacer algún día un musical y esto es lo más parecido” y admite que colaborar con el grupo ha sido un atractivo más. “Me gusta su rollo. Me motiva muchísimo llevar la cultura y el baile urbano al lenguaje teatral”. También cuenta que ha intentado  “crear una base argumental que permita conectar con los personajes, ya que tienen un arco emocional muy amplio”. 

Una orquesta combinada con un DJ

La orquesta toca la partitura tal y como fue compuesta pero también dialoga con Guilliam Sons, el experto de Brodas Bros en beat box y DJ, lo que provoca una fusión sorprendente entre la música clásica y los ritmos urbanos, lo que es un valor añadido muy importante que interviene para darle un toque más moderno. Incorpora arreglos de DJ Mix y guiños a temas como Organ donor de DJ Shadow. Igualmente, al final sonará el Tonight de Yuksek. El espectáculo respeta al máximo el original que, recordemos, ya era una gamberrada en la que Saint Saëns se reía de todo lo que le rodeaba, por lo que la combinación de todos estos elementos es más que pertinente.

Animales representados por máscaras

Pero aún hay más, ya que los seis Brodas Bros que participan lucirán unas originales máscaras plateadas para representar a los animales. El director artístico Lluc Fruitós nos desvela las características de los personajes: “el elefante está formado por cuatro bailarines unidos, cuatro cajas plateadas representan a los cucos, el león es vegetariano, no es el rey y hace meditación trascendental, el cisne es el más dulce y femenino, Phax lleva unas garras y se expresa mediante unas transformaciones vocales de beat-box, con máquinas de loops (repeticiones), los fósiles son dos esqueletos enormes, el gallo y la gallina mantienen una relación de pareja y se identifican por sus crestas. El burro es, como su nombre indica, bastante burro pero al final demuestra ser el más valeroso y atención a las tortugas, que protagonizan un gag final”. Y todo ello ejecutando acrobáticas danzas que nos impresionarán y divertirán al mismo tiempo. Un método ideal para que los más pequeños descubran la música clásica y también disfruten de un espectáculo repleto de humor, fantasía y elegancia.