LA CARTELERA

Estrenos de cine de la semana: críticas de 'Dolor y gloria' y el resto de películas

Drama, terror, documental... Estas son las seis propuestas de EL PERIÓDICO para este fin de semana

El Periódico / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

¿Vas a ir al cine este fin de semana? Echa un vistazo aquí a todas las opiniones de los últimos estrenos hechas por los críticos de EL PERIÓDICO, entre los que destacamos 'Dolor y gloria', de Pedro Almodóvar. 

'Dolor y gloria' [Drama] (★★★★★)

Almodóvar ha manejado a la lo largo de su obra elementos de autoficción con bastante temple. En 'Dolor y gloria' el trazo autobiográfico es absoluto desde la misma composición del reparto. ¿O acaso no es una declaración de principios que Antonio Banderas, uno de sus actores más determinantes, encarne en el filme a un cineasta que es un reflejo en varios aspectos del propio Almodóvar? ¿O que Penélope Cruz, una de sus actrices más preciadas, y Julieta Serrano, presencia callada pero generosa a lo largo de toda la obra del autor de 'Laberinto de pasiones', den vida a la madre del cineasta en la edad joven y a las puertas de la muerte?

Banderas interpreta a un director que lleva años retirado del cine aunque sigue creando. Su cabeza continúa siendo un laboratorio de ideas desperdigadas en notas y en documentos en el ordenador. Pero su cuerpo no le acompaña. Siendo aún relativamente joven, su organismo no ha resistido bien los embates del tiempo. Dolores en la columna vertebral, migrañas, respiración fatigosa, andar lento. Dolor y gloria, aunque esta pertenece el tiempo pretérito.

Salvador, el personaje en cuestión, dirigió en 1986 su última película, 'Sabor', que ahora ha restaurado la filmoteca y quieren volver a proyectar. A partir de esta idea, y a pesar de lo que le cuesta, Salvador se reactiva a sí mismo y recompone partes de su pasado tan alteradas como su organismo. Por ejemplo, la amistad con el actor de aquella película. Una mirada nueva sobre el pasado, porque los ojos cambian pero no los filmes. También hay adicciones, como la heroína fumada. Y un trasvase permanente entre el hoy y el ayer con atisbos de un mañana que se antoja algo mejor. [Leer másPOR QUIM CASAS.

'Nosotros' [Terror] (★★★★)

En la línea del cine de terror no exento de comedia negra que Jordan Peele expuso en su primer filme, 'Déjame salir', el segundo trabajo tras la cámara de este polifacético cineasta, 'Nosotros', propone otra parábola política, demasiado evidente en algunas cosas, inquietante en otras, a partir de una cierta paranoia por el doble, tema de tan buenas películas y literatura.

Los protagonistas son los cuatro miembros de una familia afroamericana que pasan las vacaciones en la californiana Santa Cruz. La esposa vivió en el parque de atracciones de la playa, 30 años antes, una experiencia traumática que poco a poco se irá desvelando. Pero acepta ante la insistencia del marido. A los pocos días se produce una imagen brutal: cuatro siluetas, dos adultos y dos niños, se plantan de noche delante de su casa. Cuando pueden verles las caras, descubren que son ellos mismos.

'Nosotros' juega muy bien con los efectos especulares y con la figura del doble. Desde las sombras en la arena hasta ese reflejo escalofriante ante un espejo que no te devuelve tu imagen cuando lo estás mirando de frente, sino que te ofrece tu propia espalda. Desde los gemelos hasta el versículo bíblico de Jeremías 11:11. Todo puede multiplicarse o imitarse.

Nosotros tiene el impacto de la historia de alienación de 'La invasión de los ladrones de cuerpos' pasada por un filtro posmoderno en el que Peele impone humor en las situaciones más tensas o filma una matanza entre el 'Good vibrations' de Beach Boys y el 'Fuck the police' de Niggas with Attitudes. Del surf al gansta rap, del ideario californiano a la realidad violenta de una nación alucinada. POR QUIM CASAS.

'Peret, yo soy la rumba' [Documental] (★★★)

El documental empieza con esta célebre frase de 'El hombre que mató a Liberty Valance': "Cuando la leyenda se convierte en realidad, se imprime la leyenda". Peret es leyenda y realidad de la rumba. Paloma Zapata cuenta con mucho material bien hilvanado. Evoca aspectos de la infancia del protagonista (la guerra, el sexo) en blanco y negro. Recupera actuaciones, entrevistas y un fenomenal gag con Tip y Coll en el que la surrealista pareja le pide que demuestre que es gitano, que es catalán y que sabe tocar la guitarra. 'El mig amic'. Los gitanos del portal. El filme es también el retrato de una Barcelona que apenas existe. POR QUIM CASAS.

'Funan' [Drama animado] (★★★)

Denis Do se inspira en los recuerdos de su madre, una superviviente del genocidio de Camboya, para explorar la crueldad cotidiana que tenía lugar en los campos de trabajo de los Jemeres Rojos. La animación tradicional le sirve para documentar el horror con delicadeza y sin usarlo para hacer espectáculo ni explotar a las víctimas; de hecho, es tanta la sensibilidad con la que Do evita detalles escabrosos que ocasionalmente cae en la confusión narrativa, y en todo caso ese tacto no le impide recurrir a algún cliché. Pese a ello, 'Funan' logra ser una mirada convincentemente precisa y conmovedoramente oscura a una de las mayores atrocidades del siglo XX. POR NANDO SALVÀ.

'Bel canto' [Drama] (★★)

Adaptando el 'best-seller' homónimo de Ann Patchett, que ficcionaba la toma de rehenes que tuvo lugar en 1996 en la residencia del embajador japonés en Lima, la nueva película de Paul Weisz maneja asuntos tan potencialmente jugosos como secuestros masivos, amores prohibidos, revoluciones políticas y gorjeos operísticos y, sin embargo, carece de toda intensidad dramática. Mientras trata de ensalzar la capacidad de la música para trascender choques ideológicos y barreras lingüísticas y culturales, además, 'Bel canto' ofrece una de las pocas interpretaciones genuinamente terribles de la actriz Julianne Moore. POR NANDO SALVÀ.

'Vosotros sois mi película' [¿Documental?] (★★★★)

Lo de menos es el pase polémico en el pasado Festival de Sitges, aunque se entiende que los espectadores salieran indignados. De hecho, esa proyección es algo así como un 'macGuffin' como los de Hitchcock. No es más que el acicate para una serie de actos y reflexiones que van más allá del mundo propio de los 'youtubers' y si acaban o no teniendo ocho millones de visitas a consecuencia de todo aquel espectáculo.

Estoy completamente de acuerdo con una de las cosas que se dice en el filme de Carlo Padial: los creadores de contenido son hoy los punks del audiovisual. Pero una alerta, no para Padial, que ha hecho un filme que no es, como resulta habitual en él, ni documental ni ficción ni mezcla de las dos cosas (el género Padial no cuadra con todo eso), sino para Wismichu y compañía: los punks fueron domesticados por el sistema.

A partir del gag-bucle-provocación que se proyectó en Sitges, se construye una trama práctica sobre el audiovisual actual, la incidencia de las redes, el papel de los críticos, los productores, la distribución, el fanatismo y los festivales. Con ironía, con gags excelentes (Carlos de Diego, uno de los guionistas del filme, abatido y solitario tras el pase en Sitges) y dejando, claro, la voz cantante al 'youtuber' protagonista.

No me creo que no quiera ser famoso, o que sea incapaz de ver en una sala la tomadura de pelo orquestada que proyectó en Sitges, pero eso forma parte del juego. Genio o sociópata, dice un espectador al salir del Retiro de Sitges. Comparaciones con Duchamp y Bansky. Ni lo uno ni lo otro. El filme de Padial lo deja meridianamente claro. POR QUIM CASAS