CRÍTICA DE CINE
'Dragon Ball Super: Broly': ruido para oyentes versados
Sus peleas, exóticas, coloridas e ilógicas, rozan la psicodelia; y el duelo final dura alrededor de 40 minutos de metraje, que son puro Shakespeare
Contemplar la vigésima entrega cinematográfica de la saga 'Dragon Ball' sin ser miembro veterano de su entregada audiencia genera el mismo tipo de desconcierto que ir al cine en un país extranjero a ver una película local sin conocer el idioma. Por otra parte, tanto su complicadísima mitología como su escueta premisa argumental son absolutamente irrelevantes. Los fans de este superpoblado multiverso lo son sobre todo por sus peleas, tan exóticas, coloridas e ilógicas que rozan la psicodelia; y el duelo final de esta película dura alrededor de 40 minutos de metraje, que son puro Shakespeare: están llenos de ruido y furia, y no significan nada de nada.
- Un psiquiatra aconseja ver estas películas para aumentar la inteligencia emocional y cuidar la salud mental
- La tensión entre dos divas enturbia el estreno mundial en el Liceu de 'Lohengrin' dirigido por Katharina Wagner
- La música en directo logra otro récord de facturación y Madrid destrona a Barcelona como principal motor
- Mala Rodríguez: 'Ir en pelotas no es empoderamiento, las reinas no van así
- Sean Scully toma La Pedrera: “Quiero humanizar la pintura abstracta para que pueda comunicarse con la gente”
- Cámaras ocultas, masajes y falsas promesas: media docena de denuncias por agresión sexual para un ‘road manager’ de varios grupos de música
- Estado eléctrico', la película más cara de Netflix, tira de Millie Bobby Brown y robots: 'No estamos tan lejos de ese tipo de control
- Agatha Christie inmortal: guía para ver las mejores series basadas en sus novelas