Propuestas para pasar la Nochevieja en casa

Hay criaturas de contrastado espíritu fiestero que precisan de un escenario grandilocuente para despedir el año, una gran fiesta, un gran hotel, una gran orquesta, un gran restaurante, una noche de excesos de las que dejan huella durante un par de días; pero también hay una especie con tendencia a huir del tumulto, de lo grande y grandilocuente, más partidaria de los placeres caseros, ceremoniosos a su manera, más tranquilos. Las cuatro paredes de casa no encierran menos atractivo que la calle; todo lo más, un atractivo distinto –y a la carta–. La televisión, el equipo de música, el ordenador, pues sí: la fiesta de los electrodomésticos. He aquí una hoja de ruta para quienes cultivan el hedonismo doméstico… o los que no encontraron una buena fiesta.

Multioferta de campanadas

No encaja en ninguna parte una celebración casera en la que no brille de fondo o en situación protagonista un televisor sintonizado con las campanadas. Es cultural. Es así. Alguien apagará la música, alguien rescatará a alguien del baño, alguien saldrá a gritar: "¡Niños, las uvas!", y todo confluirá en un festivo tumulto ante la caja que ya no es caja. No es menor el asunto de en qué cadena participar del ceremonial: la decisión, al fin y al cabo, divide en segmentos estéticos a la población. Si es La 1 (o La 2), Anne Igartiburu y Roberto Leal; si es TV-3, Helena García Melero y Marc Ribas; si es Antena 3, Cristina Pedroche y Alberto Chicote; si es La Sexta, Cristina Pardo e Iñaki López; si es Tele 5, Lara Álvarez y Jesús Calleja (que no estarán en la Puerta del Sol sino en Sant Llorenç de Cardassar, en Mallorca, la localidad arrasada por la riada de octubre).

Humor y resúmenes en TV

Quien piense que es apolillado ver las campanadas y no tenga especial debilidad por entrar en el juego de cómo iba vestida la presentadora de turno y qué se veía o dejaba de ver a través de qué transparencias o en el apogeo de qué escote, pero considere que la televisión es compañía y quiera disfrutar de ella durante la noche, ese espécimen no carece –naturalmente– de oferta. Puesto que es fin de año y planea sobre el inconsciente colectivo la idea de "resumen", TVE-1 se saca de la manga ‘Retratos salvajes’, programa inspirado en la famosa película argentina del 2014 (‘Relatos salvajes’) para repasar en formato de narraciones breves e irónicas la actualidad del 2018. Conduce, de nuevo, José Mota. TV3 también quiere hacer reír y echa mano de ‘Zona 2018’ para hacer repaso de los momentos deportivos cómicos del año, pero sobre todo de ‘Polònia’, por donde desfilarán Cristina Cifuentes, Carles Puigdemont, Franco y Quim Torra, entre otros. Como resumen también destaca ‘Zapeando’, en La Sexta. Se recomienda zapear de resumen en resumen como experiencia esquizofrénica.

Una lista de Spotify

También es opción apagar el televisor y aprovechar que probablemente no habrá nadie en el edificio –habrán huido los espíritus fiesteros– para poner música, y además ponerla bien: que haga, si viene al caso, temblar las ventanas. Spotify pone al alcance de sus usuarios listas especialmente pensadas para la ocasión, se diría que para todos los gustos, como ‘¡Nochevieja!’, ‘Dance Party’, ‘Dance Classics’, ‘Rock Party’ y hasta ‘Throwback Party’. Porque los placeres caseros y ceremoniosos también incluyen hacer la fiesta en casa. Los usuarios proponen sus propias listas, bautizadas con nombres que no carecen de elocuencia como ‘Horteras, preciosas y orgullosas’, ‘Chau2018’, ‘Duro año’ y ‘2018 ATR’, cuyo subtítulo merece la pena ser consignado: "Porque hay que despedir el año y asegurarse de que no vuelva".

Un clásico del cine

Criatura cinéfila: el mundo no se olvida de ti. No se ha hecho poco cine con la noche de fin de año como telón de fondo o tema principal, y es menos pecado regodearse en ello cuando afuera retumban los ecos del cotillón. Cualquier lista carecerá del atributo de lo exhaustivo: ‘El apartamento’ (cine clásico), ‘Cuando Harry conoció a Sally’ (comedia romántica), ‘Días extraños’ (ciencia ficción), incluso ‘Boogie nights’, cuyo relato pasa por una noche de fin de año, la de 1980, en la que todo se precipita hacia la tragedia. Se encuentran en vídeoclubes (aún hay alguno) y a tiro de decembrino clic.