Los secretos de 'Nos vemos allá arriba'

Este drama ambientado en la posguerra de 1920 que combina cine bélico, drama y gotas de comedia cuenta con múltiples elementos poéticos y artísticos como las máscaras que luce el protagonista y una cuidada reconstrucción de la época, motivos por los cuales está repleto de curiosidades a descubrir.

-Los premios: obtuvo cinco César (el Goya francés) en las categorías de mejor director, guion adaptado, vestuario, fotografía y decorados. La ganadora de la última edición fue 120 pulsaciones por minuto. Curiosamente, el argentino Nahuel Pérez Biscayart protagonizaba ambas películas y fue premiado como mejor actor revelación por el drama sobre la homosexualidad.

-El origen: es la primera vez que el director Albert Dupontel se basa en una obra anterior y no es un guion original propio. Asegura que se atrevió a rodar el filme tras leer la novela y descubrir que tenía unos personajes desconcertantemente modernos. ”Unos pocos dominan el mundo y hacen sufrir a los humildes que luchan por sobrevivir a través de los siglos”, algo que era aplicable en 1920 y en la actualidad.

-El guion: Dupontel explica que la versión que rodaron del guion era la decimotercera. Dos de ellas fueron provocadas por sus reuniones con el autor de la novela, Pierre Lemaitre, para que fuera lo más fiel posible al original.

-El realizador / actor: el director, que también es actor (visto en Un héroe muy discreto o Irreversible) no tenía previsto interpretar al coprotagonista, Albert Maillard, papel que reservaba a su amigo Boulie Lanners quien, finalmente por exceso de trabajo, no pudo intervenir. El cineasta se lanzó entonces a un casting que definió como frenético pero los actores que podían haberle sustituido estaban ya ocupados y los que no los estaban no le convencieron, así que decidió asumirlo él.

-La voz de Nahuel: el personaje que interpreta perdió la mandíbula en la guerra, por lo que su manera de hablar era muy peculiar. Para interpretarlo intentó sacar la voz del esófago, un recurso que utilizan las personas que han perdido las cuerdas vocales y acabó optando por un sonido más gutural y cavernoso.

-Reconstruyendo una guerra: para recrear la primera guerra mundial, el realizador se inspiró en títulos como Alas de William Wellman, Sin novedad en el frente, de Lewis Milestone o Senderos de gloria de Stanley Kubrick.

-Los efectos especiales: Dupontel contactó con el experto en efectos especiales Cédric Fayolle incluso antes de escribir el guion que se basó en fotos de la época y el guion gráfico para crear su versión de los años 20.

-Las máscaras: un elemento muy importante y vistoso del filme son las bellas y elaboradísimas máscaras que luce Pérez Biscayart. Fueron creadas por Cécile Kretschmar inspirándose en la psicología del personaje y también en sus cambios de humor. Artísticamente se basaba en distintas corrientes desde el cubismo al surrealismo y también en Fantomas, el icono francés de este tipo de complemento.

-Los otros compositores: aunque la banda sonora fue escrita por Christophe Julien, incorpora temas cinematográficos antiguos de Nino Rota (Raquel) y de Ennio Morricone (Suspicion), además de algunos fragmentos de obras de Rachel Portman.