La viabilidad del Temporada Alta, pendiente de un recurso sobre el IVA

La viabilidad del festival Temporada Alta de artes escénicas está pendiente de un recurso sobre el pago de 1,4 millones de euros en concepto de IVA aplicado a subvenciones que le reclama Hacienda, con el que se pretende esquivar el aval exigido para llevar a cabo esta apelación.

El director de la cita, Salvador Sunyer, ha explicado hoy que "todo pende de un hilo" ya que la empresa productora, Bitó, ni puede abonar el dinero ni avalar esa cantidad como condición indispensable para acudir a los tribunales.

La primera vía para mantener el festival activo, según ha detallado Sunyer, es la de reclamar la concesión de una exención del aval argumentada en que "no se trata de un fraude, sino que han cambiado de interpretación" en cuanto a la tributación de las subvenciones.

El responsable del Temporada Alta ha relatado que "toda la vida" se había considerado que las ayudas de la administración a la cultura estaban exentas del IVA y que sólo se debía justificar que todo el dinero recibido se invertía.

"Así se ha hecho siempre con ayuntamientos, Generalitat, Diputación, Ministerios y Comunidad Europea", ha indicado Salvador Sunyer, quien ha añadido que no ha habido "una sola pega en veinticinco años".

Ahora, a Sunyer se le exige el IVA de las subvenciones de los últimos cuatro años y su queja es la de que ese dinero se ha invertido en espectáculos.

La fecha máxima para recurrir es el próximo 5 de enero y la única opción de Bitó para hacerlo es obtener esa exención del aval cuya petición se tramitará la semana que viene o, en su defecto, que lo afronte alguna fundación, para lo que se mantienen conversaciones actualmente.

Por el momento, la productora trabaja en la planificación de la próxima edición del festival y su director está convencido de que saldrán "adelante".

Salvador Sunyer, que ha pasado hoy balance de este año junto a la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, ha asegurado que, ante esta situación sobre el pago del IVA, algunos artistas se habían ofrecido a venir en 2018 sin cobrar, opción que ha descartado.

Madrenas ha manifestado en su turno que "grabar la cultura con este IVA grava directamente los fundamentos del país y las libertades de las personas".

En cuanto al balance de la edición que se acaba de clausurar, Salvador Sunyer ha admitido que ha sido la "más difícil" y se ha referido a la situación política en Cataluña.

En ese contexto, Sunyer ha confirmado que se devolvió el dinero de las entradas adquiridas de forma anticipada a quienes lo solicitaron por coincidir el día del espectáculo con alguna movilización.

Además, un montaje se suspendió por coincidir con una jornada de huelga, aunque la ocupación del festival ha sido de un 90,5 por ciento, cifra calificada de éxito.

Salvador Sunyer ha explicado que la comunión entre escena y público ha sido "única" y que la gente le agradecía un rato de asueto en medio de una situación de tensión.

La política, en todo caso, no ha afectado a la venta de localidades, aunque se ha reducido la anticipada y ha aumentado la de última hora.