Mireia Pujol-Busquets asumirá progresivamente la dirección de Alta Alella

Mireia Pujol-Busquets asumirá progresivamente las funciones de su padre, Josep Maria Pujol-Busquets, al frente de la bodega Alta Alella, especializada en vinos y cavas ecológicos y naturales, que ha dado a conocer hoy su nueva marca Mirgin, que unificará los cavas ecológicos.

Licenciada en Biología por la Universidad Autónoma de Barcelona, Máster en Agricultura Ecológica por la Universidad de Barcelona y grado superior de Sumiller en el CETT, Mireia Pujol-Busquets ha crecido paralelamente a la bodega y tiene una dilatada experiencia en el sector vitivinícola, tanto en agricultura ecológica como biodinámica.

Alta Alella ha vendido recientemente al grupo Peralada la marca de cava Privat en respuesta a la logística que le exigía su distribución en Suecia. "Hemos preferido reducir a la mitad la producción para no perder nuestra esencia de empresa familiar y de producto local", ha comentado hoy Josep Maria Pujol-Busquets.

Mirgin, marca que sale de los nombres de las dos hijas del matrimonio Pujol-Busquets Guillén (MIReia y GeorGINa); y el deseo de la familia para que -a corto plazo- todos sus cavas salgan al mercado con la calificación Gran Reserva, con una crianza mínima garantizada de 30 meses.

Los dos nuevos cavas Mirgin Reserva y Mirgin Rosé Reserva, representan, respectivamente, "la expresión de la frescura como una manera de entender el cava" y "un retorno al origen con la primera variedad utilizada para la elaboración de cava", ha señalado el bodeguero.

Con nueva imagen, obra del diseñador Fernando Gutiérrez, estos dos nuevos cavas se suman al ya existente Gran Reserva, procedente del paraje Vallcirera y que es la apuesta de la bodega para pasar a formar parte de la nueva categoría "Cava de Paraje Calificado", distinción de la DO Cava para los cavas Gran Reserva provenientes de un "paraje excepcional".

Este cava pasará a llamarse Mirgin Vallcirera y formará parte de una categoría Premium a la que actualmente solo optan 10 bodegas y, de hecho, será el único procedente de una bodega con una producción propia dentro de un Parque Natural, en este caso el parque de la Serralada de Marina.

Alta Alella plantó sus primeros viñedos de Pansa Blanca y Mataró en 1991 y ahora dispone de más de 25 hectáreas ecológicas ubicadas entre las localidades de Tiana y Alella.