La escritora Cristina Cerrada novela la identidad individual de una refugiada

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La escritora madrileña Cristina Cerrada aborda en su última novela, que ha titulado "Europa", la faceta más íntima y familiar de las personas que, a causa de la guerra, se convierten en refugiados y a los que la integración en los países de acogida no les permite mantener su identidad como individuos.

Editada por Seix Barral, "Europa" cuenta la historia de Heda, una joven que llega a Europa occidental junto con su familia huyendo de la guerra en su país, donde un día fue violada por un soldado, un hecho que la perseguirá en su nueva existencia cuando se reencuentre con su atacante.

La novela, asegura la autora en una entrevista con Efe, surgió de de un sueño, con el que empieza el relato, sobre "el temor en el inconsciente colectivo a lo largo de la historia a la guerra, a ser desposeído del hogar y expulsado del sitio donde se habita. El miedo al otro ser humano que se vuelve violento".

Una situación que, lamentablemente, dice Cerrada (Madrid, 1970), se ha vuelto muy cotidiana en la actualidad y que han vivido personas que están muy cerca de nosotros.

"Heda tiene enormes deseos de conseguir lo que ya se había propuesto antes de que su vida terminara de esa forma, ya que pertenecía a una familia ilustrada, su padre era un conocido intelectual en su país y ella una universitaria con expectativas, que la guerra y su huida truncan".

Para poder llevar a cabo esa esperanza, la protagonista usa estrategias que luego vive con mucha culpa, como el acercamiento a un hombre poderoso, a cambio de "lograr un camuflaje con la cultura del país".

"Al refugiado parece que se le recibe con los brazos abiertos si renuncia a su pasado, y eso supone un trauma terrible porque se enfrentan a la ansiedad de querer parecer del país de acogida, ser uno de ellos y eso les hace renunciar a su identidad y a lo que les ha constituido como individuos", sostiene Cerrada.

La escritora considera curioso que esto suceda en Europa, una sociedad con una gran multiplicidad de minorías culturales y de género que se toleran perfectamente pero con una gran intolerancia y reticencia hacia las identidades de los refugiados.

"Si se analiza desde un enfoque sociológico puede explicarse en términos de grupo, porque cuando uno de fuera se aproxima a un grupo hay una reacción de reticencia de tal forma que la identidad europea se siente más reforzada por oposición a los integrantes de otras culturas que se nos acercan", señala la autora.

Por eso no ha querido concretar en su relato ni el tiempo y ni el espacio "para llamar la atención sobre el hecho de que es muy similar a otras situaciones que se han vivido en Europa en el último siglo y medio, pero que no se han conseguido canalizar pese al tiempo que ha pasado".