ÓBITO

Manolo Tena, voz rota con carácter latino

El cantante madrileño de origen extremeño, autor del disco 'Sangre española', fallece a los 64 años

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

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Hace cuatro días, el pasado octubre, pudimos verle en la sala Barts con ganas de volver a empezar, luciendo canciones nuevas y tratando de convertir la energía que le llevó al lado oscuro, a la adicción y el rumbo discográfico errante, en fuente de regeneración e inspiración, pero la enfermedad se ha interpuesto en su camino. Un cáncer de hígado terminó la mañana de este lunes con la vida de Manolo Tena, veterano del rock desde los años 70 y autor del popular ‘Sangre española’.

Ese disco que, en 1992, le convirtió en artista de multitudes le dio su perfil definitivo: el cantante de rock con pulsiones latinas, de voz rasposa pero cálida, de textos en primera persona que expresaban temperamento, romanticismo y lírica urbana. Pero Tena, nacido en Benquerencia de la Serena (Badajoz), el 21 de diciembre de 1951, establecido en Madrid desde su infancia, llegó a ‘Sangre española’ ya cuarentón, arrastrando un inestable currículo a lomos de dos bandas, Cucharada Alarma!!!

Con Cucharada se adentró en un ‘underground’ madrileño muy literal, puesto que el grupo actuó a menudo en el metro. Próximos al colectivo libertario ‘La Cochu’, Laboratorio Colectivo Chueca, integraron su lenguaraz ‘Social peligrosidad’ en la antología ‘Rock del Manzanares. Viva el rollo 2’ (1978), publicado por Chapa, compartiendo vinilo con Leño y Asfalto. La letra la firmaba su cantante y bajista, el entonces acreditado como José Manuel de Tena. “¿Quién es el culpable y quién el inocente? / ¿El justo millonario o el pobre necesario?”. Poética subversiva, rock urbano con ramalazos progresivos y puestas en escena teatrales.

TIEMPO DE ‘MOVIDA’

Tras el álbum ‘El limpiabotas que quería ser torero’ (1979), producido con cierto lujo por Teddy Bautista, que contenía la canción ‘Compre’, crítica al consumismo que en los 90 adaptaría Siniestro Total, llegó el desencanto derivado de las bajas ventas. Ya eran tiempos de ‘movida’, pero el siguiente paso de Tena, Alarma!!!, no llegó hasta 1983. Una apuesta menos excéntrica: el trío de un rock impetuoso con sintonía new wave e incursiones en el reggae que acentuaban su cercanía con The Police primera época (oigan ‘Cansado de esperarte’).

De Alarma!!! quedaron un par de discos con cobertura multinacional. La banda no llegó a cuajar, desubicada entre las dos tribus del momento, la nuevaolera y la rockera-heavy, pero dejó un rastro de canciones a los que otros artistas rendirían honores, como ‘Marilyn’, que grabó Ana Belén, y ‘Frío’, adaptada por Barricada, Los Secretos y Quique González.

HALLAZGO LATINO

Tena se decidió a grabar por su cuenta, pero su estreno, ‘Tan raro’ (1988), hizo honor a su nombre: lanzado por el sello Elígeme, con Sabina implicado, su lírica rockera desengañada apenas obtuvo repercusión. El disco maldito de Manolo Tena, en contraste con los fastos de ‘Sangre española’ (1992), donde suavizó su querencia por el rock, el blues y el soul con inflexiones latinas en éxitos como la pieza que dio título al disco, ‘Tocar madera’ y ‘Qué te pasa’ (con su cercanía a ‘All that heaven will allow’, de Springsteen).

Recordaba Tena meses atrás a este diario que “el éxito es, como dijo Dylan, una extraña manera de fracasar”, y ‘Sangre española’, que le dio proyección comercial y un camino a seguir, no hizo su vida más afortunada. Arreciaron sus problemas con las drogas, que él asociaba a su naturaleza adictiva, mientras ‘Las mentiras del viento’ (1995) y ‘Juego para dos’ (1998) rebajaban la tensión. Demandado por su discográfica por no querer trabajar con sus productores, tenía la cuenta embargada por Hacienda.

Pero el año pasado, ‘Casualidades’, su primer disco en siete años, le mostraba reanimado al tiempo que TVE le dedicaba un documental de ‘Imprescindibles’ y La Sexta le incluía en el ‘docu-reality’ ‘A mi manera’. El ingreso en el hospital Gregorio Marañón, de Madrid, violentó su agenda de conciertos, activa estos días: su último concierto fue el 19 de marzo en Las Palmas y planeaba seguir de gira y grabar un disco el año que viene, haciendo suyo el significado del tatuaje que lucía en un antebrazo, la escritura japonesa del verbo “sobrevivir”.