MENORCA
Nelson y Lady Hamilton
Está documentado que el almirante Nelson, famoso por sus victorias en las Guerras Napoleónicas y en Trafalgar, llegó a la isla de Menorca el 12 de octubre de 1799 a bordo del Foudroyant. Se sabe que se hospedó en el predio de Sant Antoni, hermosa finca del puerto de Maó más conocida como Golden Farm, y que seis días después zarpó para Sicilia y Malta. Fue una estancia breve que no da para mucho, pero la leyenda popular se encargó de enriquecerla añadiendo que el almirante regresó dos veces a Menorca, en 1799 y en 1800, acompañado de su amante, Lady Hamilton.
Las relaciones del almirante y Emma Hamilton han dado mucho juego a lo largo de la historia, aunque no se ha podido probar ni que el almirante regresara a Menorca ni que la isla fuera su nido de amor. En cualquier caso, lo que sí está documentado es que la dominación británica de la isla, entre 1708 y 1802 (con intervalos), marcó en varios aspectos a la isla.
La ginebra
El Camí d'En Kane, que el gobernador Richard Kane hizo construir entre Ciutadella y Maó para evitar la carretera que pasaba por los pueblos del interior, es quizás la herencia más notable, aunque también lo son, a otro nivel, la introducción de la ginebra y la arquitectura de algunas mansiones. Fue Richard Kane, por cierto, quien cambió la capitalidad de la isla, de Ciutadella a Maó, al considerar que esta última ciudad tenía mejor puerto. Más todavía: los británicos ampliaron el castillo de Sant Felip, levantaron el fuerte Marlborough en el municipio d'Es Castell y construyeron un hospital en la Illa del Rei, en pleno puerto de Maó.
El novelista inglés Patrick O'Brian (1914-2000) inauguró en 1970 su famosa serie de novelas marineras con Master and Comander (Capitán de mar y de guerra). En ella asistimos, en Maó, al encuentro de los dos personajes principales: Jack Aubry, capitán de la Royal Navy, y el cirujano catalano-irlandés Stephen Maturin.
Más allá de las novelas, sin embargo, la historia que más conmueve a los turistas británicos que visitan Menorca es la del romance entre el almirante y Lady Hamilton. Que la relación existió es un hecho, ya que incluso tuvieron una hija ilegítima, pero es sumamente improbable que Maó fuera escenario de sus amoríos. De todos modos, la imaginación popular insiste en alojarles en la Golden Farm, mansión con vistas excepcionales y hermosos jardines situada en la ladera norte del puerto de Maó.
Sissí y el príncipe de Gales
Dicen que fue precisamente en esta finca donde el rey Alfonso III de Aragón desembarcó en el año 1287 para conquistar la isla, hasta entonces dominada por los árabes. La parte más antigua de la mansión data del siglo XIII, pero la fachada fue construida por los británicos en el siglo XVIII. Después de que el almirante Nelson se alojara en ella, en 1799, también lo hicieron la emperatriz Sissí, el Káiser Guillermo II y Eduardo VII, príncipe de Gales, entre otras personalidades. Lady Hamilton, sin embargo, no consta.
Actualmente, la Golden Farm mantiene todo su esplendor, aunque ha renunciado al elitismo de antaño. Reconvertida en explotación de agroturismo, la mansión se alquila para celebrar bodas y eventos en los que se supone que los invitados, en especial los invitados británicos, sueñan con revivir la pasión ardiente que unía al almirante Nelson con Lady Hamilton.
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