El festival de cine fantástico de Catalunya

'Somos lo que hay' acerca la familia al canibalismo

J. G.
SITGES

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La familia que come carne fresca humana unida permanece unida. La película mexicanaSomos lo que hay, del debutante Jorge Michel Grau, dejó el Auditori de Sitges en estado de choque, pues relata, entre el realismo social y el terror, los desazonantes avatares de una familia sin recursos económicos que, tras la muerte del progenitor, debe seguir adelante cazando presas humanas y, por supuesto, zampándoselas. El acercamiento de Grau al canibalismo es crudo y naturalista en cuanto estudio sobre la desintegración de la familia y, por extensión, de la canibalización de una sociedad, la mexicana, en avanzado estado de putrefacción moral, según su director.

También dentro de la sección oficial a competición se proyectó ayerConfessions,un portentoso ejercicio de estilo del director japonés Tetsuya Nakashima. Una profesora de colegio revela en mitad de una clase que el accidente que sufrió su hija pequeña y que le causó la muerte fue provocado por dos de los alumnos que hay en el aula en ese momento. Nakashima ofrece un fascinanante tratado sobre la venganza y la sociopatía de la juventud japonesa, y lo hace con un depurado, casi quirúrgico, estilo formal de irresistible belleza. El filme fue despedido con una merecida ovación. No fue este el caso deA woman, a gun and a noodle shop, el desconcertante, posiblemente innecesario,remakerealizado por Zhang Yiumou de la ópera prima de los hermanos Coen,Sangre fácil.