'El poder de la palabra', localismo universal

Una de las ventajas de la aceptación generalizada del cine documental es que ya no es necesario documentar grandes temas o personajes. Lo que importa, en líneas generales, en la mirada personal de un director que escoge un tema, sea la comida basura, el deterioro del medio ambiente, una familia corrupta o, como el caso que nos ocupa, la toma de conciencia de un colectivo ¿el de los vendedores ambulantes que venden sus productos en los autobuses de Santiago de Chile¿ que debe regenerarse a sí mismo cuando el Gobierno les pone en la picota.El poder de la palabrafunciona bien como retrato de supervivencia y radiografía de una sociedad cambiante, y aunque el tema resulte localista, tiene una obvia resonancia universal.