INVESTIGACIÓN POLICIAL DESDE ABRIL

El pederasta de Ciudad Lineal está acusado de 5 abusos y 3 tentativas

En la década de los 90, el agresor, de 42 años, cumplió condena por retener y agredir a otra menor

Comparecencia del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, junto a la Delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes.

Comparecencia del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, junto a la Delegada del Gobierno de Madrid, Cristina Cifuentes. / periodico

MANUEL VILASERÓ / MAYKA NAVARRO / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El presunto pederasta de Ciudad Lineal , detenido a las 7.37 de este miércoles en Santander, está acusado de cometer cinco abusos consumados y de intentarlo en otras tres ocasiones en la Comunidad de Madrid, según ha explicado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. Hasta ahora se conocían solo cuatro casos, pero al parecer en el quinto ni siquiera la familia de la víctima conoce aún los hechos, por lo que la policía no dará más detalles.

Todos los casos han tenido lugar en los distritos madrileños de Ciudad Lineal, Moratalaz, San Blas y Hortaleza, así como enn el municipio vecino de Coslada. Las menores agredidas tenían entre 5 y 11 y "un escaso dearrollo físico", según ha informado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que ha relatado que el detenido, un varón español de 42 años, ya cumplió una condena de siete años en los años 90 por un detención ilegal y agresuión sexual contra una niña de seis años.

Estos no eran sus únicos antecedentes, el detenido tiene, según el ministro, "un ampio historial delictivo", con otras condenas por secuestro, violencia de género y robo, además de relaciones con el crimen organizado. Aficionado al culturismo y a las artes marciales, aparenta se más joven de lo que en realidad es.

Las agresiones se producían contra menores con las que no tenía ninguna relación, con las que contactaba en parques infantiles y zonas de ocio habituales de menores. Se las llevaba al coche, a un piso desocupado propiedad de su familia y a descampados, donde las agredía. En la mayor parte de los casos las drogó para evitar que le identificaran y luego las duchó o limpió para evitar dejar rastros de su ADN.

Para eludir el cerco policial, hacía dos semanas que se había trasladado a Santander, donde las fuerzas de seguridad le siguieron la pista. En sus actividades delictivas pudo usar varios vehículos distintos porque trabajaba en un empresa de compra venta de coches. Habitualmente vive en una habitación en casa de su madre en Madrid.

La policía está esta mañana procediendo al registro de los tres domicilios (dos en Madrid y la casa donde se alojaba en Santander) y no se prevé que pase a disposición judicial hasta el próximo viernes. El último coche que usó en el secuestro de una niña dominicana del pasado mes de agosto ya ha sido registrado. La imagen parcial de este vehículo captada por la cámara de una tienda donde se detuvo durante este secuestro fue una de las pistas clave para resolver la investigación. La policía localizó en una web de venta de coches.