peligroso contaminante ambiental

La ola de calor dispara los niveles de ozono troposférico

EL PERIÓDICO / BARCELONA

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Los niveles de ozono troposférico, un peligroso contaminante que no debe confundirse con el protector ozono de la estratosfera, se han disparado en Catalunya con consecuencia de la ola de calor de las últimas semanas, desde finales de junio, hasta el punto de que se ha superado el llamado umbral de información en más ocasiones que en todo el año 2014, según datos de la red de calidad del aire de la GeneralitatEcologistas en Acción alertó ayer de esto hecho y acusó a la Administración catalana de no tomar las medidas necesarias.

Concretamente, desde el 26 de junio se ha superado el umbral de 180 microgramos por metro cúbico de aire de media horaria en 27 ocasiones, la mayoría en tres estaciones de la comarca de Osona (Tona, Vic y Manlleu), pero esporádicamente también en las del Montsec, Tarragona, Bellver de Cerdanya o Berga. A partir de 180 microgramos, el Departament de Territori de la Generalitat informa a Protección Civil, a los ayuntamientos y a los centros de salud, entre otros, «para que a su vez informen a la población de riesgo», comentan fuentes de la conselleria. El nivel de alerta, siempre según la normativa europea, se activa cuando se superan los 360 microgramos «durante tres horas consecutivas», insiste Territori, «y eso nunca ha pasado».

Informar mejor

Como recuerda Ecologistas en Acción, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que el nivel límite de protección para la salud debería ser 100 microgramos por metro cúbico, pero el miércoles, sin ir más lejos, se alcanzó un punta horaria en Manlleu de 215. «Ecologistas en Acción denuncia la insuficiente información dada por de las autoridades -dice la asociación en un comunicado-, que se limita a la publicación de datos en la web y el envío de avisos de las superaciones del nivel de información a quienes lo hayan solicitado previamente». «Es necesaria -añade- una campaña contundente que avise a la población de forma inmediata ya través de los medios de comunicación masivos para que se tomen medidas de protección a la salud, y que se explique la gravedad del problema y sus causas».

En caso de ser inhalado, el ozono ocasiona un incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas y reduce de la función pulmonar, entre otros problemas.

Aunque no se supere el nivel de alerta, Ecologistas en Acción considera que es necesario que la Generalitat «adopte medidas urgentes» que deben pasar por la «reducción drástica del tráfico urbano e interurbano y de la actividad industrial». Territori asume el problema, pero insiste en el «relativo» éxito de esas medidas porque, muy a menudo, la zona de superación del umbral no es necesariamente la misma donde se genera el contaminante.

El ozono troposférico es un gas invisible que no tiene un foco emisor, sino que se forma por combinación de dos contaminantes precursores derivados de la actividad industrial y del tráfico: los óxidos de nitrógeno y los compuestos orgánicos volátiles. Para que esta fusión se produzca, no obstante, deben darse unas proporciones ideales, además de necesitar radiación solar y una temperatura suficientemente elevada. Curiosamente, como estas condiciones no se cumplen siempre en el área de Barcelona, los vientos desplazan el problema hacia otras zonas. La comarca más afectada suele ser Osona porque la contaminación de Barcelona fluye hacia el norte por los valles del Congost y el Besòs.

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