La mayoría de partidos piden al CSN que congele la reapertura de Garoña

El organismo consultivo analiza este miércoles los primeros informes para dar luz verde a la nuclear

Campaña de Greenpeace por el desmantelamiento de Garoña en el 2014.

Campaña de Greenpeace por el desmantelamiento de Garoña en el 2014. / periodico

MANUEL VILASERÓ / MADRID

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Varios grupos parlamentarios que suman una mayoría de escaños en el Congreso de los Diputados han exigido este martes al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que congele los trámites para la reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña mientras el Gobierno esté funciones. El organismo consultivo tiene previsto examinar este miércoles varios informes sobre el cumplimiento de los requisitos exigidos a los propietarios de la planta para que esta pueda arrancar de nuevo.

La reunión se ha celebrado en el Congreso a petición de las organizaciones ecologistas Greenpeace y Ecologistas en Acción y han asistido los grupos parlamentarios del PSOE, Podemos, ERC, además de representantes de Compromís, IU y Bildu. Tanto el PNV como Democràcia i Llibertat (DiL), han excusado su presencia por motivos de agenda pero apoyan la petición.

Los partidos argumentan que dar vía libre ahora a la reapertura sería hipotecar la acción de un futuro Gobierno. Si éste decretara  el cierre, los propietarios podrían reclamar una cuantiosa indemnización por lucro cesante.

PRESIÓN AL NUEVO GOBIERNO

"Es absolutamente pertinente que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) interrumpa sus funciones al menos durante estas semanas. Sería una presión inadmisible sobre un Gobierno que después quisiera pronunciarse sobre Garoña de forma autónoma", ha señalado Paco Castejón, portavoz de nucleares de Ecologistas en Acción.

Los mismos partidos convocados este martes celebraron una cumbre al final de la pasada legislatura en la que se comprometieron a impedir la reapertura de Garoña en caso de obtener una mayoría de escaños.

Los informes del CSN tienen carácter preceptivo y vinculante, aunque los que se examinan este miércoles aún no son los definitivos. Quedría aún nuevo trámite que se podrían demorar unas semanas más. Si al final el dictamen fuera negativo, obligaría al cierre de la planta y, si fueran positivo, la decisión última quedaría en manos de Industria y del Consejo de Ministros.

La secretaria de Medio Ambiente del PSOE, Pilar Lucio, ha recordado que su grupo parlamentario ha presentado una iniciativa en la Cámara esta legislatura con el objetivo de que no se reabra la central.

Podemos ha presentado también en la Cámara una proposición no de ley instando a la no reapertura de la central, y la semana pasada varios de sus diputados se desplazaron a la sede central del CSN para solicitar que el proceso se paralice hasta que haya un gobierno. "Un gobierno en funciones debe actuar en asuntos del día a día pero la reapertura de una central no lo es", ha destacado el parlamentario de Equo y Podemos Juantxo López de Uralde.