VISITA RELÁMPAGO A LAS MISIONES DEL EJÉRCITO

Rajoy subraya en Malí que "el terrorismo es enemigo de todos"

MAYKA NAVARRO / BAMAKO (enviada especial)

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Ni cuatro horas duró la visita relámpago que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hecho este domingo a Malí en el marco de un viaje al África subsahariana que este lunes por la tarde finalizará en Senegal. A cuatro días del arranque de la campaña para las próximas elecciones municipales y autonómicas, Rajoy quiso felicitar personalmente a los militares españoles que desde Malí ayudan a combatir el avance del yihadismo. Y tuvo muy presente en su encuentro con las autoridades malienses la grave crisis migratoria que sufre el Mediterráneo y que en lo que va de año se ha cobrado ya más de 1.700 muertos.

En el cuartel general de la misión de la Unión Europea EUTM-Malí, al mando hasta julio del general español Alfonso García-Vaquero, Rajoy agradeció ante la tropa su trabajo, su esfuerzo y su contribución a la estabilidad y la paz en España. "Vivimos momentos difíciles en muchos lugares del mundo. Estamos aquí para ayudar al pueblo de Malí", subrayó, aunque también para "defender los derechos, las libertades y la seguridad" de los españoles. "Los grandes enemigos de toda la humanidad son los que disponen a su antojo de las vidas y derechos de los demás. España ha librado muchas batallas contra el terrorismo. El terrorismo hoy es enemigo de todos", recordó. Rajoy prefirió no leer su discurso y dejarse "llevar" por lo que sentía.

Un gesto de cercanía que propició el cariño con el que García-Vaquero agradeció la visita del presidente. Con una temperatura en el exterior de casi 40 grados en la sombra, Rajoy escuchó también las palabras de dos misioneros españoles que, tras casi medio siglo en Malí, le pidieron colaboración para mantener con sus proyectos solidarios.

La visita fue tan breve que Rajoy no pudo visitar la esencia de la misión, el cuartel de Koulikoro, donde las tropas españolas adiestran al futuro ejército maliense, el que combate en el norte contra el avance del yihadismo. "Problemas y dificultades hay en todos los países del mundo, en algunos más que en otros. Pero si algo es capital para asegurar el futuro de un país es que tenga un ejército con formación, conocimiento y sepa manejar las cosas en los momentos difíciles", dijo. Es la tercera visita de Rajoy a las tropas en el exterior desde que llegó a la Moncloa. Las anteriores fueron a Afganistán y Yibuti, en navidades del 2012 y el 2013. En el 2014 delegó en la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.

ENFRENTAMIENTOS

La misión europea en Malí se lanzó en febrero del 2012 para reforzar al Ejército local, incapaz de hacer frente a la revuelta tuareg, cuyo control acabaron tomando grupos yihadistas próximos a Al Qaeda. A punto estuvieron estos de hacerse con el control de Bamako si no llega a intervenir Francia. Rajoy llegó en un momento muy complicado en el país, tras durísimos enfrentamientos entre el Ejército y los grupos rebeldes tuareg que han provocado una veintena de muertos en los últimos días. Unos enfrentamientos que amenazan con llevar al traste la firma de un acuerdo de paz entre el Gobierno y la Coordinadora de Movimientos de Azawad (CMA), prevista para el próximo día 15.

EUTM Malí tiene 550 militares de 27 países, entre ellos 120 españoles, de la Brigada Aerotransportable (Brilat) y el Mando de Operaciones Especiales. Hasta ahora se ha instruido a seis Grupos Interarmas malienses, equivalentes a seis batallones.

LA AGENDA EN SENEGAL

En Dakar, Rajoy visita el lunes la base naval, donde se encuentran las dos patrulleras de la Guardia Civil que vigilan la costa y el patrullero de la Armada Vencedora, que está realizando una gira por países del golfo de Guinea y el África Occidental facilitando instrucción a las marinas de los respectivos países en los que amarra. El presidente también visitará en el aeródromo de Dakar el destacamento Marfil del Ejército del Aire, que, con un avión Hércules y 54 militares, presta apoyo a la operación Barkhane, que cubre cinco países africanos.

Rajoy viajó acompañado por el ministro de Defensa, Pedro Morenés, y el jefe del Estado Mayor de la Defensa, el almirante Fernando García Sánchez.