Rajoy estrecha lazos con Andorra con el 'caso Pujol' de trasfondo

No todos los gobiernos (ni gobernantes) han mostrado siempre la misma afinidad con Andorra. En su etapa como 'president', Jordi Pujol hizo cinco viajes oficiales al país de los Pirineos. También se desplazó en la campaña electoral del 2003 para restañar heridas después de que su delfín, Artur Mas, caldeara los ánimos al proponer selecciones deportivas catalano-andorranas. La que hoy culminará Mariano Rajoy, en cambio, es la primera visita oficial al principado de un presidente del Gobierno de España; justo cuando la relación no oficial entre la familia Pujol y Andorra ha llegado a manos de la justicia. El exmandatario de la Generalitat declarará el día 27 como imputado tras confesar que ocultó fondos en el extranjero durante 34 años.

Ayer, en una parada previa en La Seu d'Urgell para saludar al copríncipe de Andorra, el obispo Joan-Enric Vives, Rajoy soslayó cualquier referencia a su visita al país vecino y se limitó a condenar el atentado terrorista en Francia. Tampoco hizo mención alguna al proceso soberanista catalán, por el cual monseñor Vives ha pedido respeto más de una vez pese a que anoche también evitara pronunciarse al respecto. Aunque de forma secundaria, esa cuestión también entra en juego en la visita: el presidente del Gobierno, que ayer se convirtió en un pasajero más de los que han aterrizado en el aeropuerto de Alguaire, despegará hoy del aeropuerto de Andorra-Seu d'Urgell. Será el vuelo inaugural de una infraestructura cuya propietaria es la Generalitat, que ha sufragado las obras. No ha gustado nada en el bloque soberanista que Rajoy sea el primer viajero.

REUNIÓN DE VUELTA / Tampoco ha agradado a CiU que el jefe del Gobierno central visite Andorra precisamente en plena efervescencia del 'caso Pujol'. La Moncloa insiste en desvincular el viaje de los escándalos que rodean al fundador de CiU y a su familia, pero la sombra de los trasiegos monetarios del 'expresident' y de los suyos  otorga un plus de morbo al encuentro de esta mañana con su homólogo andorrano, Antoni Martí.

El objetivo de la reunión -que da continuidad a la que ambos gobernantes mantuvieron en septiembre en Madrid- pasa entre otros por agilizar el intercambio de información fiscal entre ambos países con la incorporación de un sistema automático que permitiría detectar fraudes como el que la justicia investiga a los Pujol. Además, está prevista la firma de un convenio para evitar la doble imposición de impuestos entre ambos estados, lo que abarataría los negocios bilaterales al empresariado.

La presencia del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro -el mismo que relacionó los fondos opacos de Pujol con la 'conversión' de este al independentismo-, demuestra el carácter eminentemente económico de la cita. En esa línea, el Gobierno español ha querido ensalzar que la visita de Rajoy también tiene como fin expresar su respaldo a que Andorra pueda participar «en el mercado interior» de la UE y las políticas comunes mientras se desprende de la etiqueta de paraíso fiscal, de la que empezó a renegar seriamente en el 2011. También se mostrará el apoyo a que el país vecino tenga un mayor papel en el sistema de cumbres iberoamericanas.