CDC y ERC firman un acuerdo de mínimos para su plan soberanista

CDC y ERC han alcanzado este viernes un "principio de acuerdo" que sienta las bases de la hoja de ruta a seguir después de las elecciones del 27-S. El pacto, genérico y que no establece plazos, contempla que si las fuerzas soberanistas suman mayoría absoluta en esos comicios, el Parlament haría una "declaración solemne de inicio del proceso hacia la constitución del nuevo estado o república catalana". Los siguientes pasos serían la "iniciación del proceso constituyente", el despliegue de los "mecanismos de transición nacional" y de las "estructuras de Estado" y, por último, la "culminación democrática del proceso por parte del pueblo de Catalunya".

El redactado de esta última fase del proceso es tan ambigua que no aclara si se trataría de un referéndum sobre la independencia de Catalunya, algo que defiende CDC pero a lo que ERC se opone. De hecho, los firmantes reconocen que el documento quiere ser lo suficientemente "abierto" para que se puedan incorporar más adelante otras fuerzas políticas y sociales. De momento lo han suscrito también EUiA, Reagrupament, MES (marca escindida del PSC) y las entidades independentistas ANC, Òmnium Cultural y la Associació de Municipis per la Independència. La reunión que ha alumbrado el documento de bases se ha celebrado en el Eixample de Barcelona, aunque no ha transcendido el lugar concreto.

Otro de los acuerdos pasa por considerar como plebiscitarias las elecciones del 27-S, aunque el documento no se utiliza explícitamente esta palabra. Los comicios "deben servir de mecanismo legal para conocer la voluntad del pueblo catalán sobre su futuro político", reza el texto, que evita también utilizar el término 'referéndum'. No han participado en esta negociación ICV, que en su reciente convención nacional proclamó que su apuesta es por un "Estado libre y soberano dentro de una España plurinacional", la CUP, que quiere aprobar su propia hoja de ruta antes de que acabe marzo, y Unió, que celebrará el 14 de junio una consulta a la militancia.

Este documento se ha pactado justo horas después en que el sondeo oficial de la Generalitat ha confirmado el bajón electoral de CiU y ERC, que no sumarían mayoría absoluta, y también que los contrarios a la independencia han aumentado del 45,3% al 48% en tres meses, consolidándose como mayoritario el rechazo a la secesión. El anuncio de este preacuerdo ha tenido lugar mientras en el Palau de la Generalitat se celebraba una reunión entre el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y dirigentes de Unió y CDC para intentar limar asperezas por las críticas de algunos sectores convergentes al líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida.