Margallo, sobre Catalunya: "Cuando uno se encuentra una sublevación, se sofoca"

El ministro de Exteriores afirma que la crisis de 1934 ya se vinculó a una sentencia constitucional

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El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha vuelto a añadir más leña al fuego del conflicto catalán. En una entrevista en Antena 3, Margallo ha calificado de "sublevación en toda regla" la presentación por parte de Junts pel Sí y la CUP de una propuesta de resolución para iniciar el camino de ruptura con España. Pero no se ha quedado ahí, pues ha añadido: "Cuando uno se encuentra con una sublevación de estas características la sublevación se sofoca, hay que impedir que se salten la ley".

Margallo, no obstante, no ha precisado qué mecanismos hay que aplicar, pero ha incidido en que la situación está agravada por dos problemas: que procede de un órgano del Estado, no de una fuerza política; y que sus promotores no han tenido "el menor inconveniente en partir a la sociedad catalana en dos y en enfrentar a una parte de la sociedad catalana con el resto de la sociedad española".

A su entender, en Catalunya hay que hacer política pero que en esta legislatura no ha sido fácil, porque todo asunto fundamental requiere acuerdo de los grandes partidos, pero el PSOE, que ha sido tradicionalmente su interlocutor, ha estado sometido a "convulsiones importantes" que impedían negociar, porque habría sido una irresponsabilidad sentarse sin saber si al otro lado de la mesa iba a estar Alfredo Pérez Rubalcaba, Pedro Sánchez o Susana Díaz. La política en Catalunya, ha añadido, se puede hacer con o sin consenso nacional, pero son las iniciativas con consenso, como la Constitución de 1978, las que tienen éxito.

EL PROBLEMA "NO ES DE AHORA"

Margallo ha considerado que el "tema de Catalunya no es de ahora", puesto que se planteó ya en 1640, 1714, 1931 y 1934, y ha añadido: "Cada vez que hay una crisis en España se producen estas tensiones".

Según él, el 'president' Artur Mas "ha optado por decir que, si ahora no paga a las farmacias y antes no pagaba a nadie, la culpa la tenía el Gobierno central, la solución era cortar lazos, y durante un tiempo ha logrado que nadie le pidiese cuentas, pero ahora le dicen 'Usted ¿dónde nos lleva?".

Ha recordado que Mas sitúa el actual problema en la sentencia del Tribunal Constitucional de 2010 que anuló 14 puntos del Estatut --"nadie sabe cuáles son cuando he preguntado", ha ironizado--, y lo ha comparado con 1934, con la proclamación de la República Catalana por parte de Lluís Companys , cuando el origen fue una sentencia del Tribunal de Garantías Constitucionales que anuló la ley de contratos de cultivo.

Para él, en ambos casos "se eleva a cuestión política" una sentencia constitucional --cuando una sentencia es "normal en un Estado democrático" y una cuestión jurídica-- y no se imputa al propio tribunal, sino a "todo el Estado, lo cual es una serie de disparates".

"GOLPE DE ESTADO INSTITUCIONAL"

Ha opinado que Mas "ha querido ir a la independencia desde el minuto uno, y ha buscado excusas y coartadas para declarar la independencia, sublevarse en toda regla, dar un golpe de Estado institucional".

No obstante, también ha relacionado la actual situación con el Pacte del Tinell del 2003, "el intento del PSC y de ERC de hacerse un traje a la medida para Catalunya sin contar con la mitad de España que es el PP".

También ha recordado las consecuencias para una Catalunya independiente, que no sería reconocida por la ONU --como ha dicho su secretario general, Ban Ki-moon-- ni por la UE, como han dicho líderes europeos como el presidente de la CE, Jean-Clade Juncker, y la canciller alemana, Angela Merkel.