OFF THE RECORD

Joan Herrera: "Navarro ha dinamitado la relación con ICV"

El dirigente de ICV no tiene el móvil de Mas y reconoce su falta de sintonía con el 'president'

El líder de ICV, Joan Herrera, hojea 'Els barris de Barcelona', de Josep Maria Huertas Claveria, sentado en el mirador del Turó de la Rovira, con Torre Baró al fondo. JULIO CARBÓ

El líder de ICV, Joan Herrera, hojea 'Els barris de Barcelona', de Josep Maria Huertas Claveria, sentado en el mirador del Turó de la Rovira, con Torre Baró al fondo. JULIO CARBÓ

NEUS TOMÀS / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

AJoan Herrera (Barcelona, 1971) le gusta presentarse como un chico de barrio. Aplicando el refrán se diría que en sus orígenes, entreNou Barrisy laVerneda, el líder deIniciativaforjó una identidad que reivindica a menudo. Vive en elPoblenou, donde es habitual verle pasear por la calle camino de la cooperativa de consumo en la que suele hacer la compra de la semana. A diferencia de otros políticos, Herrera intenta cumplir con los principios que defiende en público. Eso no debería ser noticia, pero como se comprueba a diario leyendo la prensa, no todos los políticos se esfuerzan en ser coherentes. Por ejemplo, es de los pocos líderes que no se desplaza en un coche pagado por elParlamento el partido. Como es sabido, él es debicicleta, y en su favor hay que decir que empezó antes de queBarcelonaestuviese invadida por los ciclistas.

--¿Le molesta que le identifiquen como el chico de la bicicleta?

--¿A estas alturas me da igual. Lo que me molestaría es que me llamasen el chico del coche oficial.

--¿Y que se identifique a Iniciativa con el pijerío 'progre'?

--¿Hay gente a la que le ha interesado cultivar esa imagen, pero en mi caso no es así porque yo estudiaba y trabajaba a la vez. Igual he descargado camiones que he hecho de monitor de natación. Si no me fui de Erasmus fue porque no me lo podía pagar.

Considera que la imagen de un partido vinculado a las élites progresistas responde solo a un estereotipo e invita a los que piensan así a que le acompañen a dar una vuelta por los barrios en los que se crió.

Herrera recuerda con nombres y apellidos a compañeros de instituto que se quedaron en el camino por culpa de la droga. Evoca unaCatalunyametropolitana "durísima", sin apenas servicios sociales, y un entorno reivindicativo que, según su propia descripción, le sirvió como aprendizaje. Porque en ese mismo instituto, el Joan d¿Àustria, en la Verneda, tomó conciencia de la lucha obrera. Cuando vio a lasJuventudes Obreras Cristianas(JOC) cortar la Gran Via para protestar por el plan de empleo juvenil felipista decidió que su futuro pasaría por el activismo.

Después llegó el 'No a la Guerra', el movimiento del 0,7%, las acampadas en la Diagonal... y Portoalegre, el foro social en el que descubrió Brasil, un país que señala como uno de sus referentes por tener una izquierda que ha sabido combinar las propuestas de crecimiento económico con las medidas destinadas a intentar proteger a los más desfavorecidos. Y allí hay muchos.

Una de las quejas habituales del líder deIniciativa--muchos periodistas pueden dar fe de sus lamentos-- es que empezó a proponer medidas contra el sobreendeudamiento de las familias cuando los bancos y cajas repartían hipotecas y preferentes a destajo.

Las diferencias

Herrera se hizo un nombre en su etapa como diputado en Madrid, cuando en el 2004 llegó a ser elegido el diputado revelación. Se estrenó con el debate de la primera investidura de José Luis Rodríguez Zapatero. Recuerda que cuando subió a la tribuna estaba hecho un saco de nervios. Pronto aprendió cómo funcionaba el Congreso. Para bien y para mal.

--El segundo tramo de esa legislatura fue el de la frustración. Zapatero prefirió los acuerdos con CiU y ninguneó nuestro diagnóstico de la crisis. Reconozco que la gente tampoco nos escuchó.

--Supongo que lo dice por el mazazo que se llevó en las siguientes generales [ICV perdió uno de los dos diputados que tenía en Madrid].

¿Sí, y reconozco que me cogió una pájara porque no lo entendía. Tenía la sensación de que habíamos hecho un buen trabajo. Y encima perdimos el escaño mientras comparecía ante la prensa para valorar el resultado. Fue por los pelos y en directo.

Entonces achacó ese varapalo al voto útil y a un bipartidismo que gozaba de mejor salud que ahora. A pesar de su decepción con elPSOE, enMadridentabló amistad con una de sus eternas promesas, el vascoEduardo Madina. También habla con afecto del republicanoJoan Tardà, a quien define como "un tío sano y de izquierdas", y entre los nacionalistas que le caen bien cita al convergenteCarles Campuzanoy a Pedro Azpiazu, delPNV.

--¿Hay diferencias entre hacer política en Madrid y en Catalunya?

--Sí

--¿Cuáles?

--En Catalunya las formas son más amables pero el menosprecio puede ser el mismo. Y en Catalunya existen determinados temas de los que no se habla.

--¿Por ejemplo?

--El modelo energético o el marco de relaciones laborales, por poner dos ejemplos. Son debates que sí se hacen en Madrid y, con el argumento de que eso se discute en el Congreso, no se abordan en el Parlament.

--¿Ser catalán en Madrid es tan duro como algunos lo pintan?

--El problema es que en el Madrid región, el PP ha hecho del anticatalanismo un factor de voto. Y el PSOE no lo ha frenado.

Tal vez por ello, el líder de Iniciativa se declara un federalista frustrado. No acepta el status quo actual, pero sigue sin aclarar qué votará en la consulta. Tampoco se atreve a pronosticar un resultado, pero es de los que cree que si fuese muy ajustado sería un desastre que jugaría en contra de los intereses del catalanismo.

--¿Que tal se lleva con Artur Mas?

--La verdad es que cuando hablamos sobre economía o servicios sociales tengo la sensación de que vivimos en mundos distintos. Acepta mal las críticas.

--¿Tiene el móvil del 'president'?

--No.

El número que sí tiene pero que últimamente marca poco es el del líder delPSC,Pere Navarro, a quien no le perdona que boicotease al candidato que Iniciativa había presentado para ser miembro de la Sindicatura de Comptes.

--¿Tan mal está con Navarro?

--Le dije a Navarro que en el debate sobre la renovación de la Sindicatura podíamos evidenciar el veto de CiU a nuestro candidato,Agustí Colom. Me respondió que ya me diría alguna cosa y al final los socialistas incluso presentaron a un candidato suyo en una maniobra que solo puede entenderse como una manera de mantener un pacto de silencio PSC-CiU. Navarro ha dinamitado la relación con Iniciativa.

El cabreo que tiene con el líder del PSC no parece impostado. Aunque en política nada es para siempre, y si no que les pregunten a Artur Mas yAlicia Sánchez-Camacho.