El Govern acepta que la reunión con Rajoy sea pública y este mes

El Govern de la Generalitat quería que la próxima reunión entre Artur Mas y Mariano Rajoy se celebrara de forma «discreta», lejos de la presión mediática y política para que pudiera ser «más productiva». Sin embargo, el Ejecutivo central quiere  que el enésimo portazo a la consulta de autodeterminación sea público y notorio y por eso ha puesto como condición que, además de celebrarse este mes, los periodistas puedan dar cuenta de ello y no tengan por qué enterarse del encuentro días después. De acuerdo, vino a decir ayer el conseller de Presidència, Francesc Homs, premisas aceptadas, pero «si alguien tiene la tentación de hacer visible un menosprecio al presidente de la Generalitat y si creen que así se quitan de encima el asunto de la consulta, allá él».

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell Executiu, el también portavoz del Govern de CiU redundó en una de las advertencias que los soberanistas acostumbran a hacer a quienes, desde la Moncloa o desde el PP, tratan de atribuir la corriente independentista catalana a las tribulaciones del president y un puñado de políticos más. «Algunos en Madrid siguen confundidos. Mas es el depositario de un mandato popular. El proceso hacia la consulta no es una manía personal. Es el pueblo de Catalunya quien quiere votar. No solo el presidente», aseveró.

LLAMADA AL BLOQUE PROCONSULTA / Poca cosa más avanzó el conseller de Presidència. Como mucho que, nada más acabe la reunión con Rajoy, el jefe del Govern tiene previsto llamar por teléfono a  los representantes de los partidos que firmaron con el Govern de CiU la fecha y la pregunta de la consulta (ERC, ICV-EUiA y la CUP) para informarles de lo hablado en el encuentro. En una entrevista en Bloomberg, Mas repitió ayer la idea de que está dispuesto a cambiar la fecha y la pregunta si Rajoy se aviene a permitir el referendo. Sin embargo, mientras ERC no parece alterarse por ahora por lo que puedan hablar ambos presidentes, otros partidos como la CUP ya le advirtieron de que no aceptarán «ninguna maniobra de negociación oculta».

VARGAS LLOSA O GABILONDO / Pero no solo el Ejecutivo catalán está bajo presión. Ante la inminencia de la reunión entre ambos dirigentes, una plataforma hizo público en Madrid un manifiesto titulado Libres e iguales en el que reclaman al Gobierno central que «rechace cualquier negociación» con los soberanistas y «aplique toda la ley y advierta con claridad de las consecuencias de violarla», porque «ninguna infracción legal debe quedar impune y ninguna sentencia puede ser desacatada».

Sus firmantes -entre ellos el escritor Mario Vargas Llosa, el autor teatral Albert Boadella, el exsindicalista José María Fidalgo y los periodistas Carlos Herrera y Federico Jiménez Losantos- proclaman además que el «secesionismo catalán se hermana con el populismo antieuropeo» y critican que los soberanistas «no han recibido la respuesta que merecen» por parte del Gobierno español.

Más conciliadores, otro grupo de intelectuales como los rectores Daniel Peña (Universidad Carlos III) y Alejandro Tiana (UNED); el catedrático Ángel Gabilondo; los periodistas José Antonio Zarzalejos y Joaquín Estefanía; la actriz Amparo Climent y el cineasta José Luis Cuerda presentarán hoy otro texto en el que emplazan a los partidos efectuar los esfuerzos necesarios» para promover una reforma de la Constitución que cuente con el mayor de los consensos posibles y que «desarrolle el sentido federal del Estado».