El nuevo lujo

Suele ser en verano cuando, a los que nos gusta la lectura, la practicamos con la calma que requiere un ejercicio cada vez más exigente. Leer se hace complicado cuando las distracciones habituales se imponen. La familia, los amigos, la televisión o la natural indolencia que algunos arrastramos son factores que obstaculizan la dedicación a la buena lectura. He llegado a mi lugar de vacaciones provisto de un buen número de libros, casi todos ensayos, y he empezado por uno escrito por Yves Michaud que describe una visión filosófica, psicológica y sociológica sobre el mundo del lujo; eso sí, con un enfoque irónico e inteligente.

El libro se titula 'El nuevo lujo', entendido este como el hábito que establece diferencias y produce distinciones mediante el consumo de objetos, comportamientos y experiencias a la que la mayoría de personas no tenemos acceso.

Según el autor, en un tiempo en el que la crisis ha marcado la vida de muchas personas, el lujo se ha ido transformando, pasando del lujo de las cosas al lujo de las experiencias. Experiencias que buscan no ser compartidas so pena de perder su valor. Todos sabemos que el lujo busca establecer diferencias entre el yo y los otros. El autor hace un análisis inteligente sobre lo que representa para la mayoría de aquellos que buscan incesantemente el lujo, que consiste en el placer de poseer algo de lo que carecen el resto de los mortales.

Paso los veranos en Eivissa, la isla más cara de España, a la que acuden personas de toda clase pero que los multimillonarios de todo el mundo han ido transformando en una pequeña Miami mediterránea a la que vienen a buscar experiencias únicas. Eivissa es una isla maravillosa por su naturaleza pero que, para lo bueno y para lo malo, ha de compartir su 'cara b' con el lujo desmesurado que buscan multimillonarios, oligarcas y estrellas de diverso pelaje.