ANÁLISIS BARÇA-MADRID

¿Se fían de alguien los presidentes?

Da la sensación, de nuevo, que tanto Florentino como Bartomeu van a tener que tomar decisiones ellos solitos, porque quieren, claro

Robert Fernández, Paulinho Bezerra y Jordi Mestre, en la presentación del futbolsta brasileño.

Robert Fernández, Paulinho Bezerra y Jordi Mestre, en la presentación del futbolsta brasileño. / periodico

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

13.25 horas del lunes. Aeropuerto de El Prat. Alguien espera sentado a su amigo en una de las mesas de uno de los restaurantes abiertos. Aún no hay puerta para el vuelo Barcelona-Marsella.

El de la mesa es Albert Valentín, uno de los mejores analistas de fútbol que existe. El que camina hacia la mesa, con su mochila al hombro y sin más, es Andoni Zubizarreta. Antes de encarar el último pasillo, dribla una mesa (él, que jamás regateó a nadie) y uno de los comensales se levanta, le saluda cordialmente y le dice “¡qué suerte que trajo a Ter Stegen!”

‘Zubi’ se siente orgulloso del halago, pero lo encuentra como insuficiente. Y, mientras camina hacia al encuentro de su amigo, el sabueso, gira la cabeza y, sin detener su paso, le dice graciosamente a su interlocutor “…y Jordi Alba ¿no?, y Neymar ¿también, no?, y Rakitic ¿o vino solo?, y Suárez, que lo querían pocos…”

¿Qué se sabe de Robert Fernández?

El comensal se vuelve a levantar y, ahora sí, le hace un auténtico homenaje emocional (y muy agradecido) al exdirector de fútbol del Barça, al hombre que Josep María Bartomeu despidió y aún no sabe por qué. Al hombre que, ahora, sí, sí, ahora mismo, le encantaría tener a su lado, pero ¿quién entendería que ‘Barto’ reclutase, de nuevo, a ‘Zubi’ para gestionar el ‘postmessismo’ tras tramitar con tantísimo acierto el ‘postguardiolismo’ con Tito Vilanova? Nadie. O todos.

Veremos cómo acaba sustituyendo Florentino Pérez a Zinedine Zidane, que se ha ido a la antigua, demostrando querer más al Real Madrid que muchos otros, renunciando a 20 millones de euros (cierto, sin avisar, feo gesto), pero sugiriéndole al presidente que meta mano en el vestuario. El ‘ser superior’ nunca ha necesitado directores de fútbol ni asesores. Lo más que se le reconoce es un “los he mimado demasiado” sobre los galácticos. Así que, como amo y señor del club, decidirá por sí solo. Al fin y al cabo, los presidentes, valientes o no, están solos. A ‘Barto’ tampoco parece importarle mucho el papel de Robert Fernández, pues Ernesto Valverde se fue de vacaciones pidiendo que siguiera y me temo que….