Decálogo para el cambio

Los 36,5 millones de españoles convocados este domingo a las urnas tienen ante sí una trascendental papeleta. Aun tratándose de unas elecciones repetidas por la incapacidad de los partidos políticos para articular mayorías de gobierno, no es la de hoy una jornada de votación más. Por mucho que sea el hartazgo y honda la decepción con los representantes políticos, mayor es la urgencia de propiciar un Gobierno de cambio que enderece el rumbo del país y amolde el funcionamiento de las instituciones a un pluralismo hasta hace bien poco inédito, pero ya certificado por el electorado en la cita de diciembre. Cada voto cuenta.

Tras una larga etapa de crisis económica, recortes sociales y devaluación interna, el aparente final del ciclo depresivo se enfrenta aún a demasiados interrogantes, agravados ahora por la anunciada salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), de imprevisibles consecuencias. En el ámbito doméstico, la arquitectura política e institucional española no ha sabido hasta la fecha dar una respuesta eficaz ni al reto de la regeneración democrática, perentorio por la superposición de los escándalos de corrupción política con la exigencia de severos sacrificios a la ciudadanía, ni al desafío de las tensiones territoriales, con el auge del independentismo en Catalunya como principal exponente.

SIN TRAMPA NI CARTÓN. La habilidad para gestionar la complejidad política, cuya ausencia tras las elecciones del 20-D impidió la investidura de un presidente y a la postre abortó la legislatura, exigirá a partir de mañana altas dosis de responsabilidad, flexibilidad y transparencia. Si los españoles vuelven a repartir la representatividad entre varias manos, ningún líder político podrá ya quedarse de brazos cruzados. España necesita un Gobierno, y lo necesita ya. La hipótesis de unas terceras elecciones debe descartarse de plano.

De igual modo que los partidos se deben a los electores, los diarios nos debemos a nuestros lectores. Por esa razón, ante el incierto panorama que se vislumbra tras esta jornada electoral, EL PERIÓDICO DE CATALUNYA ha decidido solemnizar su posición editorial ante los insoslayables pactos poselectorales, principios que mantendrá inalterables gobierne quien gobierne y sean cuales sean sus políticas. Sin trampa ni cartón, y sin esperar al veredicto de las urnas, presentamos este 'Decálogo para el cambio' con el propósito de anclar el compromiso editorial con nuestra comunidad de lectores y ante el conjunto de la sociedad.

1. EUROPA Continuidad de España en el euro y en la Unión Europea.

2. AJUSTES Negociar con la UE la ralentización del ritmo de reducción del déficit público para revertir los recortes sociales de los últimos años.

3. DERECHOS SOCIALES Rearme del Estado del bienestar y pacto de Estado para preservar y mejorar los sistemas públicos de educación, sanidad y pensiones.

4. REFORMA CONSTITUCIONAL Actualizar la Carta Magna para elevar la calidad democrática de las instituciones y garantizar a Catalunya un encaje singular en España, ratificado por los catalanes.

5. REGENERACIÓN Lucha implacable contra la corrupción y fiscalización permanente de las cuentas de los partidos políticos.

6. MÁS DEMOCRACIA Ley electoral que mejore la representatividad y propicie la rendición de cuentas de los parlamentarios ante sus votantes.

7. MODELO PRODUCTIVO Reformas que estimulen un modelo económico más diversificado, con un crecimiento equilibrado que cree empleo de calidad, impulse el mercado laboral para los jóvenes y potencie la investigación, el desarrollo y la innovación.

8. IMPUESTOS Modelo fiscal más redistributivo que acentúe la lucha contra el fraude.

9. IGUALDAD Equiparación social y económica por ley entre hombres y mujeres, racionalización horaria y plan de choque contra la violencia sexista.

10. INFANCIA Plan integral de protección de los menores e imprescriptibilidad de los delitos relacionados con los abusos sexuales.