Filosofía y sentimiento
La bondad y la maldad que me envuelven
"Hay personas que con su manera de ser curan las heridas del mundo", señala Josep M. Esquirol
Sílvia Cóppulo
Periodista y psicóloga.
Licenciada en Psicología y Doctora en Comunicación. Profesora de Comunicación en la Universitat de Barcelona
SÍLVIA CÓPPULO
Vivo en un contraste vital que me estremece. Llego a casa pensando que la vida es pura gestión de la incertidumbre, que la capacidad de resiliencia debe poderse transformar en acción, y que únicamente con la reacción no se llega a ninguna parte. Tanto en las relaciones personales, como en las profesionales y, de manera evidente, en la política.
Leo 'La penúltima bondad', del filósofo Josep M. Esquirol. Sientes que sientes, como él dice. "La bondad es más profunda que el mal. También es más radical. La bondad espolea a la acción por encima de las palabras acogedoras para curar. Hay personas que con su manera de ser curan las heridas del mundo". El autor apuesta por la sensibilidad. "No es necesario edulcorar la inteligencia emocional, porque de por sí, sentir es inteligente. Hay dos tipos de acciones: amar (…) y pensar", añade.
Homar, desnudo ante la cámara
Hace pocos días el actor Lluís Homar lloraba tranquila y desconsoladamente en 'el Divan' de TV-3, y yo lo sentía satisfecho de poderse conectar con sus dificultades emocionales, que desgranaba desnudo ante las cámaras. No estaba triste. Lejos de percibirle débil, aquella vulnerabilidad le fortalecía. Las lágrimas rodaban por un dolor conocido, cada vez más superado. Me estrechó en un abrazo inmenso. Vida.
Admiro más la bondad que la inteligencia, me confiesa el escritor Suso de Toro, y llega el silencio. Me conduce a un lugar, que sacude.
"Solo a través de la experiencia se conoce el mal. No quiero desmerecer ni la extensión ni la intensidad", continúa Esquirol. Del televisor resuenan voces de unos señores conocidos, que vomitan golpes de estado y fraudes con violencia, que buscan aplastar y no escuchan, que aunque les puedas mirar fraternalmente, apelan al terror. La maldad juega con misiles y sangre en los ojos. La indiferencia se ahoga en el mar.
"Si hay un camino político que quisiera abrir una reflexión antropológica es una anarquía en sentido franciscano", concluye el filósofo. Ya es de noche cuando cierro las páginas del libro. La bondad y la maldad que me envuelven.
- Buenas noticias: si naciste este año, cobrarás el 100% de la pensión de jubilación
- Niño Becerra lanza un aviso a los que van a pedir una hipoteca: "A partir del mes de junio...
- Los comercios del extinto Llobregat Centre de Cornellà perdonan 1,3 M de deuda a cambio de "malvender" sus locales
- Hacienda está enviando este SMS a quienes hacen la declaración de la renta: qué significa
- Catalunya se encomienda a las próximas lluvias y al deshielo para dejar atrás la emergencia por sequía
- El nuevo bachillerato que arrasa en Catalunya: así es el ‘Batxibac’
- El Govern convoca de urgencia a Renfe para abordar el "desastre diario en Rodalies" tras el fallo en la renovación de los títulos gratuitos
- Estas son las enfermedades que la yuca ayuda a combatir