Trump designa a las dos primeras mujeres de su equipo

Nikki Haley

Nikki Haley / CO PH

RICARDO MIR DE FRANCIA / WASHINGTON

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El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha añadido a dos mujeres a su equipo de gobierno. La joven gobernadora republicana de Carolina del Sur, Nikki Haley, será la próxima embajadora ante las Naciones Unidas, mientras la multimillonaria filántropa, Betsy DeVos, estará al frente de la secretaría de Educación. Ambas nominaciones le servirán al magnate para aportar diversidad a su futura Administración, formada exclusivamente hasta ahora por hombres blancos. Pero también son reflejo de sus intenciones en el plano ideológico. DeVos es una ferviente partidaria de la educación privada, en la que ha educado a sus hijos. Haley es una republicana moderada y dialogante, cercana al ‘establishment’ en Washington.

Hija de inmigrantes indios, Haley carece de experiencia en política exterior, aunque durante su etapa de gobernadora ha negociado acuerdos con grandes compañías internacionales y ha encabezado siete misiones comerciales al extranjero, según el diario 'Post and Courier'. “La gobernadora tiene experiencia probada a la hora buscar consensos, independientemente del perfil o la afiliación partidista, para sacar adelante políticas en beneficio de su estado y de nuestro país”, ha afirmado Trump al hacer pública su nominación, un comunicado en el que alaba también su talento como negociadora.

Sin revanchismo

La apuesta por la gobernadora de 44 años, casada con un miembro de la Guardia Nacional que sirvió en Afganistán, demuestra que Trump no se está dejando llevar por el revanchismo a la hora de elegir a sus lugartenientes. Durante las primarias republicanas, Haley apoyó inicialmente a Marco Rubio y más tardé a Ted Cruz, por el que “rezó” para que obtuviera la nominación en el duelo que le acabó enfrentando al multimillonario neoyorkino.

 Esa actitud también se desprende de la reunión que mantuvo el fin de semana con Mitt Romney, uno de los nombres con opciones para liderar la diplomacia estadounidense. Durante la campaña, el excandidato republicano a la presidencia encabezó la rebelión del ‘establishment’ contra Trump, diciendo que era un “falso” y un “fraude”. Aunque Haley no ha adoptado nunca el tono beligerante de Romey, se ha opuesto a los planes del magnate para prohibir la inmigración desde países musulmanes y ha condenado que utilizara el miedo como arma de campaña.

 Mucho más desconocida para el gran público es DeVos, una mujer de 58 años que nunca ha ocupado un cargo público y que es una de las grandes donantes del Partido Republicano. En Michigan, el estado del que procede, se ha distinguido por su activismo a favor de la ‘elección escolar’, un modelo que aboga por becar con fondos públicos a los alumnos que quieran estudiar en colegios privados y que no puedan pagárselo. Su nominación tendrá que ser confirmada por el Senado y, aunque la cámara está controlada por los republicanos, se espera que los demócratas traten de bloquear su nominación.  

Además de Haley y DeVos, Trump podría añadir pronto a su equipo a Ben Carson, el neurocirujano negro y ex rival suyo durante las primarias, al que ha ofrecido el cargo de secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano. Carson todavía no ha dicho si aceptará.