Internet aprieta a Obama para restringir el espionaje

Una semana después de reclamar en una carta abierta que se restrinjan los programas indiscriminados de recolección de datos que lleva a cabo la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), las grandes compañías de internet llevaron ayer sus preocupaciones directamente a la Casa Blanca. Una quincena de directivos de las principales empresas del sector se reunieron con el presidente Barack Obama y el vicepresidente Joe Biden para reclamar una reforma del sistema. Y es que la confianza de sus usuarios y, hasta cierto punto su negocio, están en entredicho. Las revelaciones de Edward Snowden han puesto de manifiesto como la NSA ha estado pinchando directamente sus redes para apoderarse de las comunicaciones de millones de internautas.

La presión para que la Casa Blanca mueva ficha va en aumento. Un juez federal dictaminó el lunes que el programa de la NSA para apoderarse de los registros de millones de llamadas es probablemente inconstitucional. Respondiendo a la demanda presentada por dos ciudadanos, el juez Richard Leon aseguró que la tecnología utilizada es «casi orwelliana» y dijo que los padres fundadores «estarían horrorizados» por el grado de intrusión en la privacidad de los ciudadanos.

Aunque la sentencia ha sido recurrida, es la primera vez que un juez estadounidense se pronuncia desde que las revelaciones de Snowden empezaron a publicarse en junio. Snowden está contento. La «cultura de espionaje global indiscriminado -escribió en una carta publicada ayer en un diario brasileño- se está desmoronando». El excontratista de la NSA se ofreció además a cooperar con las investigaciones que llevan a cabo las autoridades de Brasilia a cambio de asilo político en el país.

Al término de la reunión con los gigantes de internet, la Casa Blanca afirmó que tendrá en cuenta sus opiniones en la posible reforma de los programas de la NSA. No se espera nada radical. El comité que presentó el viernes sus propuestas está formado por funcionarios muy cercanos al espionaje.