La Administración Obama se ajusta el cinturón

EEUU quiere reducir sus tropas terrestres a niveles de 1940

El secretario de Estado de Defensa, Chuck Hagel, explica su plan de recortes en Washington, ayer.

El secretario de Estado de Defensa, Chuck Hagel, explica su plan de recortes en Washington, ayer.

RICARDO MIR DE FRANCIA
WASHINGTON

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Estados Unidos pretende reducir la tropa de su Ejército de Tierra a unos niveles que no se veían desde antes de la segunda guerra mundial. A punto de cerrar casi tres lustros de guerra permanente y en medio de un clima inclemente de austeridad económica, el Pentágono se pone a dieta.

El secretario de Defensa, Chuck Hagel, anunció ayer recortes significativos en el presupuesto militar para adaptarse a los nuevos tiempos. Unos recortes que contemplan el cierre de bases o la reducción de tropas, pero dejan intactas a las fuerzas especiales o el aparato de ciberguerra, las puntas de lanza de esa guerra sin huellas preconizada por Barack Obama.

Los cambios son un reflejo de la nueva realidad que enfrenta EEUU tras su salida de Irak y el anunciado adiós de Afganistán antes de final de año. Ya no hay ni voluntad política ni dinero a espuertas para embarcarse en largas aventuras militares, como se ha demostrado en Siria. Y eso ha hecho que el Pentágono lleve más de dos años reorganizando su estructura y modificando sus prioridades para afrontar lo que Hagel definió ayer como los retos estratégicos del futuro.

«Nuevas tecnologías, nuevos centros de poder y un mundo cada vez más volátil, impredecible y, en algunos casos, más peligroso para EEUU», afirmó desde el Pentágono.

Para Hagel es su primer presupuesto - «el primero en reflejar la transición tras 13 años de guerra»-desde que Obama lo eligió para

reemplazar a Leon Panetta.

LÍDERES PESE A LA REDUCCIÓN / Una partida que, de aprobarla el Congreso, ascendería a 496.000 millones de dólares en el 2015, 34.000 menos que en el 2011. Aunque el tajo es importante, Washington seguirá gastando tanto como los ocho países juntos que le siguen en la lista de gasto en Defensa, según los datos de Global Firepower. Es decir, su hegemonía militar frente a China, Rusia o el Reino Unido continuará  siendo incontestable.

Lo que no está claro es que vaya a mantener la capacidad para combatir en dos grandes escenarios terrestres al mismo tiempo, como hizo durante la pasada década. Así quedó ya reflejado en la Estrategia Defensiva presentada por Panetta en el 2012. Con la nueva reducción de tropas propuesta por su sucesor, el Ejército de Tierra pasará de tener de los actuales 520.000 soldados a una cifra entre los 440.000 y los 450.000, la más baja desde 1940. Este contingente, según Hagel, permitiría a su país «combatir decisivamente» en una gran guerra fuera de sus fronteras y «apoyar» en otra a las fuerzas navales y aéreas.

En su plan de ahorro, el Pentágono pretende jubilar a dos piezas venerables de su arsenal. Los legendarios aviones espías U2 serán reemplazados por los Global Hawk, un dron no tripulado de última generación, mientras toda la flota de cazas F-10, concebidos originariamente para destruir tanques soviéticos, será eliminada.

REDUCCIÓN DE AYUDAS / El punto más controvertido del presupuesto, sin embargo, son los recortes en el gasto de personal. Las propuestas de Hagel llaman a congelar los salarios de los militares en activo, al menos durante un año, y a reducir las ayudas que reciben para la vivienda y la alimentación. «El secretario Hagel ha dejado claro que, aunque no queramos hacerlo, vamos a tener que ralentizar la subida de las compensaciones y el salario de los militares», dijo antes de la comparecencia de Hagel un portavoz del Pentágono. Estos gastos se han disparado. De los 55.000 dólares que le costaba anualmente al Pentágono cada soldado en 1998 se pasó el año pasado a 91.000. Al sumarlos, los gastos de personal representan casi el 50% de todo el presupuesto de Defensa.

Pero en el Congreso va ser un hueso duro de roer. Los recortes en Defensa tienden a ser allí anatema, especialmente cuando afectan directamente al bolsillo de los militares o de los fabricantes de armas. Los grupos de veteranos comenzaron ayer mismo a dar batalla.