el INTÉRPRETE regresa a la cartelera con la comedia 'incompatibles'

Omar Sy: «El Barça es grande, hace soñar»

El actor de 'Intocable' derrocha amor por el fútbol en su visita a España

Dueño de un físico espectacular, el actor Omar Sy vive un momento de gloria en su carrera tras protagonizar la taquillera 'Intocable'.

Dueño de un físico espectacular, el actor Omar Sy vive un momento de gloria en su carrera tras protagonizar la taquillera 'Intocable'.

OLGA PEREDA / Madrid

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omar Sy no puede salir a tomar un café en París. Se lo comen vivo. Es el cómico más popular de Francia y arrasa en la calle. «Sí que puedo tomarme un café en cualquier sitio (risas). Hombre, es un poco complicado. Si nadie me dijera nada, el primer día lo agradecería. Pero el segundo me sentaría mal», admite el actor que dio vida al cuidador de Intocable, película que rompió la taquilla francesa y que en España fue vista por más de 2,5 millones de espectadores. En condiciones normales, Sy aprovecharía su estancia en Madrid para pasear anónimamente. Pero no puede. Está encadenado en un hotel promocionando Incompatibles, comedia ligera (se estrenó el pasado viernes) donde da vida a un poli de barrio. Como él, que nació en el suburbio parisino de Trappes en 1978 y ahí sigue viviendo.

Si no tuviera la agenda tan apretada, lo más seguro es que Sy viajara a Barcelona para poder ver a un equipo de fútbol que le tiene enamorado. «Todavía no he tenido la suerte de ver al Barça en directo. Pero espero poder hacerlo algún día. Es algo que hay que hacer. Hay que ver jugar a Messi. A todos los demás también. Pero a Messi obligatoriamente. El Bar-

ça es un equipo grande que hace soñar», admite con la misma descomunal sonrisa con la que se metió al público en el bolsillo con Intocable, donde daba vida al cuidador de un hombre tetrapléjico al que consigue devolverle el amor por la vida.

También se metió a muchos franceses en el bolsillo cuando se negó a asistir a un almuerzo con el entonces presidente fracés, Sarkozy. Tenía cosas mejores que hacer, le contestó Sy. «Y no le mentí. Era verdad. Estaba rodando Incompatibles», se ríe el actor, al que tampoco le interesa comer con el actual presidente, el socialista Hollande. «No quiero hacer política. Solo la hago cuando voto. Formo parte del sector acomodado de la sociedad. ¿Por qué tienen que venir ahora a pedirme mi opinión política? Que lo hubieran hecho antes», se queja Sy, refiriéndose a aquellos tiempos en que no era un idolatrado actor sino un vecino más de los suburbios de París con una madre mauritana empleada del hogar y un padre senegalés tendero.

La popularidad de Sy le ha llevado a dar el salto a EEUU, donde protagonizará la nueva entrega de X-Men a las órdenes de Bryan Singer (Sospechosos habituales). «Mi idea era pasar un año sabático con mi familia en EEUU. Pero, de repente, conocí a gente y apareció el proyecto de X-Men. Y me han surgido otros muchos allí. Yo quiero trabajar en mi país, pero no voy a decir que no si me sale un papel interesante en Hollywood», admite.