El fiscal pide dos años y medio de prisión para Aramis Fuster por una deuda de 8.000 euros

La Fiscalía ha pedido hoy dos años y medio de prisión para la vidente Aramis Fuster por adeudar poco más de 8.000 euros a una empresa informática. La conocida adivina ha admitido la deuda, pero ha alegado que ella fue estafada por un socio que está desaparecido de la justicia.

Según la Fiscalía, desde abril del año 2000 Fuster debía unos 15.000 euros a la empresa Soluciones Informáticas del Garraf por unos trabajos impagados. Un juzgado la condenó en el 2002 a pagar la deuda y se procedió al embargo de propiedades, empresas acciones o cuentas corrientes de la vidente.

Embargada una casa en Sant Cugat

Ante la imposibilidad de obtener la cantidad establecida, en enero de 2006 se acordó embargar la casa de Fuster en Sant Cugat del Vallès, pero Fuster la había vendido en el 2001, según ella, para pagar tratamientos médicos a su madre, gravemente enferma, y antes de conocer la sentencia condenatoria del 2002.

En el 2006, Fuster se mudó a Miami (EEUU), lo que volvió a impedir el resarcimiento de la deuda, que ya rozaba los 21.000 euros.

Desde el 2006, la acusada ha pagado parcialmente la deuda -que ahora está cifrada en poco más de 8.000 euros-, por lo que la Fiscalía pide que se tenga en cuenta la atenuante de reparación del daño. Además de la prisión, el Ministerio Público solicita una multa de 5.760 euros por el delito de insolvencia punible.

Roces con la prensa

El juicio ha tenido lugar esta mañana en el Juzgado Penal número 13 de Barcelona, en la nueva Ciutat de la Justícia, a donde Fuster ha llegado encarándose a la única cámara de televisión que le esperaba. También ha pedido al juez que la cámara no pudiera grabar el inicio del juicio, algo que el magistrado ha denegado.

En su declaración, la adivina ha dicho que su socio y el abogado de éste le engañaron, no le comunicaron la deuda con la empresa informática y solo la conoció cuando ya había la sentencia contra ella. La vidente ha dicho que ya había pagado una vez la deuda, pero que su socio no la había entregado a la empresa acreedora, por lo que se ha mostrado resignada a volver a pagar si encuentra trabajo.

Su abogado ha defendido la inocencia de Fuster, pero ha pedido al juez que la condena no le haga ingresar en prisión, ya que entonces no podrá seguir pagando la deuda como hace hasta ahora. Además, ha recordado que la empresa acreedora no presentó la denuncia penal, sino que sigue vigente el procedimiento civil.