Famosos en procesión

Unos cuentan que es por devoción, otros que la tradición manda, y los menos religiosos simplemente dicen apreciar la belleza que desprende la imagen de una procesión por una pequeña esquina entre olor a azahar e incienso mecida al son de una banda de música. Lo cierto es que en cuanto se ven los primeros capirotes de nazareno numerosos personajes del papel cuché se lanzan a las calles de cualquier ciudad andaluza para vivir con intensidad y fervor algunas de las procesiones más conocidas de España. Y ocultos entre las aglomeraciones de gente se convierten por obra y magia de la Semana Santa en unos expertos «capillitas».

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Sevilla y Málaga se llevan la palma en cuanto a concentración de famosos, aunque poco a poco se le van sumando otras ciudades. El más madrugador suele ser Antonio Banderas, quien no perdona un Domingo de Ramos en su Málaga natal para participar en el cortejo procesional de su hermandad, Fusionadas. El actor no ha dudado incluso algunos años en llevar sobre sus hombros el trono de la Virgen de Lágrimas y Favores, aunque en los últimos ha optado por un recorrido más liviano. Así, es mayordomo, el encargado de marcar el ritmo y las paradas a los hombres que portan las imágenes. Lo suyo es un fervor que continúa el resto de la semana: ha sido portador con la cofradía del Paso y La Esperanza y es Legionario de Honor del Cristo de Mena, que procesiona el Jueves Santo tras desembarcar en el puerto escoltado por la Legión.

EN FAMILIA

Su pasión se ha contagiado a su familia, primero a Melanie Griffith, que llevaba a Stella del Carmen y a sus hijos Dakota y Jesse Johnson, y ahora a Nicole Kimpel. Eso sí, los invitados prefieren verlo todo desde un balcón en la céntrica calle Larios, lugar privilegiado que permite no perderse un solo desfile procesional mientras se disfruta de un cátering para amenizar la espera viendo pasar cientos de nazarenos.

En esos balcones suele concentrarse también la saga de las Campos: Teresa Campos, acompañada en los últimos años por Emilio Bigote Arrocet, y Terelu. La última en unirse ha sido la baronesa Thyssen, Tita Cervera, muy vinculada a la ciudad desde que inauguró allí su museo. Tita ha sido invitada en alguna que otra ocasión a contemplar la salida de la Iglesia de Fusionadas. Borja Thyssen también ha llevado algún año la imagen del Cristo de la Exaltación con sus hijos de nazarenos escoltados por Blanca Cuesta.

El otro punto que congrega la atención de los famosos es Sevilla. Miles de personas se concentran el jueves por la noche ante la basílica de la Macarena para ver salir a su virgen, por lo que los personajes suelen refugiarse en el balcón de la hermandad que hay justo a la salida donde, de paso, tiene la suerte de disfrutar en primera fila de alguna saeta.

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Ese balcón ha concentrado a numerosos políticos, desde el matrimonio formado por José María Aznar y Ana Botella a María Dolores de Cospedal o Esperanza Aguirre. También ha atraído el interés de mandatarios internacionales como el ex primer ministro inglés Tony Blair y su mujer Cherie Booth.

Muy devota de la Esperanza de Triana es Susana Díaz, cuyo marido José María Moriche fue incluso costalero. El año pasado la presidenta andaluza invitó al ministro de Justicia Rafael Catalá a contemplar el regreso de la virgen. Francisco y Cayetano Rivera están vinculados a la hermandad, de hecho Fran se postuló como hermano mayor de la cofradía y ha sido costalero numerosos años. La imagen suscita pasión también en su hermano Kiko Rivera y la madre de éste, Isabel Pantoja, recién obtenida la libertad condicional.

BALCÓN ESTRATÉGICO

La cantante suele alquilar un balcón en La Campaña, el inicio del recorrido camino de la catedral que tienen que hacer todas las hermandades. Así se garantiza no perderse ninguna. Allí se la ha podido ver otros años acompañada por Kiko y sus sucesivas parejas; Chabelita junto al padre de su hijo, Alberto Isla, y amigos y familiares como Raquel Bollo o Anabel Pantoja.

Los Alba, por su parte, estaban muy vinculados a la hermandad de los Gitanos, en cuya iglesia están parte de las cenizas de Cayetana. Desaparecida la Duquesa, su hijo Cayetano abre la puerta del Palacio de Dueñas para recibir emocionado a la cofradía en la Madrugá.

Cada famoso tiene su hermandad y su rincón para verla. El periodista Carlos Herrera suele disfruta del paso de la Candelaria por los jardines de Murillo; Los Morancos prefieren cofradías más populosas de su barrio, como San Gonzalo o el Cristo del Cachorro. La cercanía al templo justifica también la vinculación de Naty Abascal y su hijo Luis Medina o los modistos Victorio y Lucchino con San Esteban, a cuya Virgen vistieron. Tampoco faltan las modelos como Raquel Rodríguez o María José Suárez o la televisiva Carmen Lomana, quienes cada Jueves Santo cumplen el ritual de vestirse de luto y mantilla para recorrer las iglesias.

Por su parte, el que fuera secretario de Organización de Podemos hasta esta semana, Sergio Pascual, no oculta su devoción por la hermandad de los Estudiantes. Su formación estuvo cuestionada cuando por un malentendido se difundió que querían suprimir la Semana Santa. Nada más lejos de la realidad. La prueba es José María González Santos, Kichi, que en su primer año como alcalde de Cádiz ha eliminado la representación institucional en los cortejos procesionales, para que el concejal que quiera acuda a título personal. Él mismo lo hará junto a su madre en el cortejo del Nazareno de Santa María, el señor de Cádiz.