Un parado, líder de UGT

El líder de la UGT de Catalunya, Josep Maria Álvarez, recibirá hoy una nómina inusual. Por primera vez, el secretario general del sindicato empezará a cobrar del Inem. Desde el pasado 1 de diciembre consta oficialmente como un parado más en la lista de 575.948 demandantes de trabajo inscritos en el Servei d'Ocupació de Catalunya (SOC). Tras recibir la notificación de Alstom, la empresa en la que seguía en nómina, de que su relación laboral acababa a final de octubre por la ejecución de un ERE, Álvarez pasó el trámite de cientos de miles de parados: pedir cita en una oficina del SOC.

Esta vez, el veterano dirigente ugetista no se salvó del paquete de prejubilaciones pactadas por el comité de la fábrica de Alstom en Santa Perpètua de Mogoda. El acuerdo preveía que los que hubieran cumplido 57 años en el 2014 se retiraran con la garantía de percibir un 85% del sueldo hasta los 63 años entre la paga del Inem y un complemento de la empresa. «Yo tengo suerte porque salgo bien parado, pero otros muchos desempleados con mi edad -58 años- están en una situación mucho peor, por lo que es necesario dar soluciones», explicó el líder a este diario.

Con el sueldo que percibía, Álvarez cobrará la prestación máxima para un desempleado sin hijos a cargo de algo más de 900 euros al mes. Tras «reflexionar» sobre su futuro desde el verano pasado -cuando ya sabía que estaba afectado por el ERE-, ha optado por mantener su hoja de ruta, que pasa por agotar su mandato hasta el próximo congreso. La única variación es que el final se adelantará un año por la decisión del secretario general de UGT, Cándido Méndez, de anticipar los congresos para salir al paso de la crisis interna que atraviesa.

Cuota reducida

La UGT catalana vive la insólita situación de estar dirigida por un desempleado. «Los estatutos del sindicato lo permiten, solo faltaría que discriminaran a los parados. Ahora pago la cuota reducida para los afiliados en paro», aseguró Álvarez.

El veterano dirigente, que lleva 24 años al frente de la UGT de Catalunya, asegura que «el relevo interno ya está en marcha» cuando falta un año y medio para que deje el sindicato en el próximo congreso. «Después del verano se visualizará más el relevo en la dirección del sindicato -añadió-. Tenemos un equipo joven. Será necesario salir de la teleraña con propuestas y respuestas para los afiliados y la sociedad». Entre los dirigentes mejor situados para tomar el relevo se encuentra el presidente del comité de Seat, Matías Carnero, que en febrero se vuelve a presentar a las elecciones sindicales.