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Hacienda lanza una ofensiva para aflorar apartamentos turísticos

Interior de un apartamento turístico legal en la Rambla de Barcelona.

Interior de un apartamento turístico legal en la Rambla de Barcelona.

AGUSTÍ SALA / Barcelona

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La Agencia Tributaria quiere también una parte del pastel que aportan los apartamentos turísticos. En este sentido, ha requerido a las plataformas de internet que comercializan los alquileres a cambio de una comisión información sobre los propietarios de las viviendas. El objetivo de Hacienda es determinar si tributan por este negocio que está en auge.

Para esta ofensiva, el fisco cuenta con el apoyo de la Administración catalana, ya que podría salir beneficiada si afloran negocios de este tipo que deberían tributar por el impuesto de establecimientos turísticos. El año pasado, la Generalitat ingresó 34,5 millones de euros con este gravamen que se empezó a recaudar en noviembre del 2012. En enero de este año ya se habían recaudado 6,4 millones de euros.

La Generalitat ha desarrollado su propia campaña de inspección para que se regularicen estos negocios. En un año se han regularizado 25.691 viviendas de uso turístico y 205 establecimientos de apartamentos turísticos, lo que supone haber aflorado 153.055 plazas.

Los apartamentos turísticos ya entraron a formar parte del plan de inspección de la Agència Tributària de Catalunya (ATC). Se calcula que hay unos 14.000 0 15.000 apartamentos en la capital catalana, una de las ciudades más de moda entre los turistas; a los que hay que sumar otros en zonas costeras y turísticas.

Plazas no regularizadas

El conseller de Empresa i Ocupació, Felip Puig,  se comprometió en el Saló Internacional de Turisme de Catalunya a luchar contra el intrusismo y la oferta de hospedaje ilegal, con especial dedicación a los apartamentos y las viviendas de uso turístico.

Hacienda trata de obtener datos no solo para ese gravamen autonómico que recae sobre los alojamientos sino sobre el impuesto de la renta (IRPF), si los titulares de las viviendas son personas físicas, o de sociedades, si son personas jurídicas.

Además, en el IRPF, cuando no son actividades profesionales sino rendimientos del capital inmobiliario de particulares, estos alquileres no disfrutan de reducción del 60% o del 100% si el inquilino tiene entre 18 y 30 años al no ser viviendas habituales. Sí, en cambio, se les pueden aplicar todo tipo de gastos, desde los de amortización a otros.

Los responsables del fisco consideran relativamente sencillo captar información sobre este negocio. Basta con contactar con el intermediario, que dispone de todos los datos y luego hacer visitas a los apartamentos afectados, explican fuentes conocedoras de esta operación. Otra cuestión es cuando el alquiler lo hace directamente un particular. Esos casos son más difíciles de detectar. El auge de estos alojamientos ha despertado no pocos recelos entre los hoteleros. Cada vez son más las personas que recurren a esta opción. El Ayuntamiento de Barcelona tiene previsto aprobar una suspensión o moratoria en la concesión de licencias para viviendas de uso turístico en L'Eixample y otros barrios para evitar una concentración excesiva.

Los intermediarios han registrado un auténtico boom. Existen plataformas españolas e internacionales en internet que ponen a disposición de los usuarios métodos de pago, vídeos, fotos y todo tipo de facilidades. Las comisiones que perciben pueden llegar al 40%, según fuentes de Hacienda.

La ley de turismo de la Generalitat incentiva la regularización con la «comunicación responsable», por la que los propietarios u operadores notifican su actividad a sus ayuntamientos. Con ello el Govern ha creado un registro y un número que los titulares deben hacer constar al comercializar los apartamientos.