OPERACIÓN FINANCIERA

CaixaBank tira la toalla y retira la oferta por el banco luso BPI

La entidad financiera toma la decisión al verse truncada su intención de poder controlar el banco

Gonzalo Gortázar e Isidre Fainé.

Gonzalo Gortázar e Isidre Fainé.

OLGA GRAU / BARCELONA

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CaixaBank ha perdido la partida contra la empresaria angoleña Isabel Dos Santos por el control del banco portugués BPI. La entidad que preside Isidre Fainé y dirige Gonzalo Gortázar anunció ayer que retira la oferta pública de adquisición (opa) sobre el 100% de BPI, cuarto banco de Portugal con 44.565 millones de euros de activos.

CaixaBank controla un 44% del capital del banco luso, el cuarto del país, pero solo posee el 20% de los derechos de voto debido a los estatutos vigentes. La hija del presidente de Angola es la propietaria de la firma Santoro, segundo accionista del BPI, con el 18,6% del capital. Con la mitad de participación que CaixaBank, Dos Santos tiene el mismo poder de voto en BPI.

La cúpula de CaixaBank, cansada de tener una participación mayoritaria en un banco en el que no puede ejercer ningún tipo de control, decidió el pasado 18 de febrero lanzar una opa sobre el 100% de BPI sin pactarla con Dos Santos. Impuso dos condiciones para culminar la operación: que la oferta tuviera una aceptación de más del 51% del capital y que los estatutos del banco se modificaran para eliminar el actual límite de voto. La junta general de accionistas de BPI se reunió el miércoles, en una convocatoria forzada por Dos Santos, para votar el cambio de estatutos, lo que requería contar con la adhesión del 75% del capital de BPI. La propuesta fue rechazada.

CaixaBank anunció ayer que inicia «una fase de análisis de las alternativas estratégicas disponibles respecto de su participación en BPI, teniendo en cuenta los objetivos de su Plan Estratégico 2015-2018». Una de los escenarios factibles es que CaixaBank venda su 44% en BPI, aunque el límite de voto es un elemento disuasorio para potenciales inversores y resta valor a la participación, o bien diluir su capital con el tiempo. Dos Santos, por su parte, pretende fusionar BPI con otro banco portugués, el BCP. Pero para ello necesita el voto de CaixaBank, lo que augura que la partida de ayer no será ni mucho menos el último asalto.