Can Vies recurre al micromecenazgo y recolecta 2.040 euros en dos horas

La plataforma Can Vies ha lanzado la mañana de este miércoles la campaña de micromecenazgo reconstruim.canvies.org con la que espera conseguir 70.000 euros para la reconstrucción del edificio y para costear los gastos judiciales las personas detenidas, y ha recolectado ya 2.040 euros en tan solo dos horas.

El portavoz de la Plataforma de Apoyo a Can Vies, Ferran Aguiló, ha señalado a los medios que, del total que se consiga, 40.000 euros se destinarán a la rehabilitación del inmueble, a tareas de gestión, seguros para quienes colaboren activamente, a la contratación de mano de obra profesional y a la compra de materiales.

Según Aguiló, un 30% de esta partida será básicamente para mano de obra, mientras que el 70 % se empleará en conseguir materiales, aunque muchos de ellos provendrán de reciclaje.

"Seguramente necesitaremos más dinero", ha enfatizado el representante de la Asamblea de Can Vies, Pau Guerra, dado que las cifras son provisionales y no podrán concretarse más hasta que la organización acceda al interior del edificio.

La cantidad de financiación necesaria dependerá de la elaboración de un proyecto que contabilice las horas de trabajo y la suma de materiales que donen los voluntarios, pero ya han inferido que Can Vies se quedará seguramente en una rehabilitación y no en un reequipamiento.

Esta cuestión se tratará, entre otras, esta tarde durante la reunión entre las distintas comisiones para establecer las líneas de trabajo.

Los 30.000 euros restantes se repartirán entre los grupos Rereguarda en Moviment y Alerta Solidària que los destinarán a cubrir los gastos judiciales de las 67 personas detenidas por los altercados de las últimas semanas, así como para poner más denuncias por "la brutalidad policial" y la "tortura de facto en las calles".

Las microdonaciones llevan recompensas que van desde ver el nombre del donante en un mural de agradecimiento en la fachada del edificio, a un pack de pegatinas o de postales, un cartel serigrafiado o una entrada a un concierto solidario.

Esta semana operarios contratados por Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), propietaria de Can Vies, han comenzado a realizar el "mínimo" de obras necesarias para que el edificio histórico parcialmente derribado deje de comportar un peligro para las personas.

Pero ayer los trabajadores encontraron amianto, usado para la fabricación de fibrocemento, y que provoca cáncer, a lo que Aguiló ha afirmado que donde se encontraba este material es "donde se comenzó a intervenir, donde estaba la capilla y la excavadora", lo que denota que "la demolición del edificio no cumplía los requisitos". Fuentes, tanto de TMB como de los colectivos de Can Vies, han negado, sin embargo, este miércoles la existencia de amianto.

El pasado jueves fuentes de la empresa municipal descartaron que TMB "reconstruya" el edificio si el colectivo de Can Vies, que lo ha okupado desde 1997, acepta la cesión temporal por dos años, hasta su derribo total, que le ha ofrecido el ayuntamiento, siempre y cuando presenten un proyecto viable de reconstrucción, asuman su coste y tramiten las licencias oportunas.