BCN aplaza el cierre y el pago en el parque Güell

El proyecto de CiU para el sobreexplotado parque Güell, consistente en la implantación de una entrada -previo pago, se entiende- para los no barceloneses con el fin de proteger el frágil vergel ideado por Gaudí anunciado para este otoño deberá esperar. La concejala de Gràcia, Maite Fandos, confesó ayer durante la Comisión de Cultura del ayuntamiento que todavía no tienen atado ni por dónde cerrarán el parque, ni cómo, ni cuánto se tendrá que pagar ni cómo se deberá efectuar ese pago. «Hay dos posibilidades sobre la mesa para hacerlo viable jurídicamente», explicó la edil, quien en julio había asegurado en la rueda de prensa del balance del primer año de mandato que el cierre se haría efectivo «después del verano», es decir, ya.

En esa misma rueda de prensa, Fandos explicó que se establecería un sistema de venta de entradas de antemano por internet y que el coste por entrada estaría por encima de los cinco euros -bonificaciones aparte-, si bien la cifra debía concretarse, algo que aún no ha sucedido.

En la Comisión de Cultura, Fandos afirmó que quiere presentar la propuesta a los vecinos «entre este octubre y noviembre», y que después trasladará un informe a la comisión municipal para su debate. «Prevemos poner en marcha el cobro de entrada a principios de 2013, una vez el plan esté cerrado y sea una época de menor presión turística», aseguró ayer optimista la concejala. De hecho, esas mismas dos premisas, plan aprobado y menor presión turística, fueron las que dio en julio para justificar la decisión del cierre en otoño.

La distinción en el pago entre los barceloneses -los únicos que no abonarán nada- y el resto de humanos es el asunto más espinoso, y algo que debe avalarse jurídicamente, ya que una normativa europea impide discriminar entre ciudadanos comunitarios. Según subrayó Fandos, el ayuntamiento baraja dos vías -que la edil no concretó-, e insistió en que «con los vecinos del parque no habrá problema por su derecho de paso y a parque público», y apuntó que el consistorio prevé enviarles un pase a casa para que accedan sin pagar.

FALTA DE CONCRECIÓN / La oposición

-PSC, PP, ICV-EUiA y UpB- coincidió en instar a Fandos a presentar un «proyecto global definitivo» tras años de debate sobre cómo debe ser el acceso al parque, al que acuden 25.000 visitantes diarios de media

-23.500 entre semana y 30.000 los fines de semana-, el 97,6% de los cuales son turistas, según un informe municipal del pasado julio.

Ante estas críticas, Fandos defendió que el gobierno «no se ha quedado de brazos cruzados» sino que «ya ha ido solucionando temas», como la definición del plan de autocares y el aumento de los agentes de la Guardia Urbana destinados al plan contra la venta ambulante en la zona, a los que se añade un cabo que patrulla por el parque. Fandos también prevé mover la parada del bus turístico «antes de acabar el año».