La resolución de los incidentes de Vila-real

Más trato de favor

Competición castiga a Pepe con solo dos partidos y anula la primera amarilla a Sergio Ramos

CARLOS F. MARCOTE
MADRID

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El Comité de Competición volvió a sentar cátedra con otra bochornosa resolución que habrá colmado de satisfacción al Madrid, aunque el club blanco no lo admitirá nunca de manera oficial. Pepe llamó «hijo de puta» al árbitro del miércoles en El Madrigal, Paradas Romero, pero el órgano disciplinario de la federación decidió ayer que tal expresión no constituye un insulto sino simplemente una actitud de menosprecio hacia el colegiado, por lo que sancionó al defensa portugués con dos partidos de suspensión únicamente. Y para que José Mourinho, suspendido por un partido por su doble amonestación, no se quede sin centrales titulares para el partido de hoy contra la Real, el comité dejó sin efectos disciplinarios la primera amarilla vista por Ramos por no haber relatado el árbitro los motivos con detalle. Özil no se libró de ser sancionado con un partido ni Rui Faria, el preparador físico, de ser castigado con dos por su reincidencia.

Tan escandalosa fue la decisión que hasta el Comité de Apelación, que rechazó horas después los recursos del Madrid, dejó en el peor de los lugares a sus colegas --Alfredo Flórez, Enrique Arnado y Lucas Osorio-- por entender que no actuaron con equidad. Apelación no puede aumentar el castigo por imperativo legal, pero hizo constar en su resolución que Pepe tenía que haber sido sancionado con un mínimo de cuatro partidos por una expresión que debió ser calificada como una injuria. En los casos de Özil y Rui Faria, con dos y tres por menospreciar al árbitro.

«Vaya atraco, hijo de puta», espetó Pepe a Paradas en el túnel de vestuarios después de haberse pitorreado de él al término del partido con un caluroso apretón de manos. El árbitro solo recogió en el acta el insulto, pero Competición optó ayer por considerar que no hubo tal, sino solo menosprecio, por lo que le impuso una sanción de dos partidos. Si lo hubiese calificado como insulto, el castigo hubiese ido de cuatro a 12.

LIBRE DE CULPA / El Madrid pretendía incluso que su jugador quedase libre de toda culpa por falta de pruebas, algo con lo que no podía tragar el comité, que aceptó la presunción de veracidad del acta arbitral. Sí fueron atendidas las alegaciones madridistas en lo referido a la primera amonestación de Ramos. Paradas escribió que amonestó al central sevillano por «infringir persistentemente las reglas del juego» y Competición lo desautorizó por no haber relatado con detalle cuál fue la infracción. Se da la circunstancia de que el Comité Técnico de Árbitros ha cursado esta misma temporada una circular en la que recuerda a los colegiados que deben amonestar a quienes cometan faltas o infrancciones con reiteración. También fue anulada la amarilla a Pepe por lo que Paradas consideró simulación de agresión al final del primer tiempo.

Así que Mourinho podrá contar hoy con Ramos, aunque él mismo no estará en el banquillo ya que ha sido castigado con un partido. El Madrid alegó que otros entrenadores hacen observaciones y salen del área técnica sin ser sancionados. Una argumentación cínica teniendo en cuenta que la sanción podía haber sido mucho más dura si Paradas hubiese recogido en el acta los insultos que el técnico le dedicó. Al menos dos veces le llamó «hijo de puta» en portugués, según recogió Cuatro.

GESTOS OFENSIVOS / Tampoco salió mal parado Özil por mofarse del colegiado al aplaudir una de sus decisiones. De dos a tres partidos podían haberle caído si el comité hubiese considerado que con su actuación menospreció a Paradas. Competición se limitó a calificarla como «gestos ofensivo». La misma calificación recibieron los aplausos de Rui Faria, expulsado por ello del banquillo, lo que conlleva dos partidos de sanción por concurrir el agravante de reincidencia. El preparador físico ya ha sido expulsado cuatro veces.

Y por supuesto el comité no entró de oficio en los gestos y palabras de Cristiano Ronaldo al término del partido. «Solo robar, solo robar», repitió el goleador, según recogieron los micrófonos de La Sexta.