Los años 60 y 70, una apuesta segura para el próximo invierno

La cantante británica e icono de moda, Jane Birkin

La cantante británica e icono de moda, Jane Birkin

SARA ANDRADE / Barcelona

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¿Qué veremos el próximo otoño-invierno en las tiendas? ¿Qué macro y micro tendencias imperan este año y el que viene? Resolver esto no es tarea fácil, requiere de estudios sociológicos y de un gran bagaje sobre la cultura de moda, además de un estudio exhaustivo sobre las propuestas que se vieron el pasado invierno en las pasarelas mundiales.

Las tendencias se suelen adaptar a los calendarios de moda, es decir a lo que entendemos por otoño-invierno, primavera-verano. Pero según Pilar Blazquez, presidenta de la Asociación catalana de Coolhunting, "cada empresa de moda tiene su propia forma de cazar las tendencias y se adaptan a sus propias estrategias y clientes. Normalmente a un año vista a la temporada se comienzan a detectar los diseños, colores, tejidos y tendencias que marcarán la temporada", explica. Pilar también señala que cada vez más las tendencias van marcadas por el 'streetstyle' y que en caso de Zara y otras marcas 'low cost' ocurre cada semana algo nuevo en sus tiendas o internet.

Opina igual Patricia Sañes, 'trendsetter' y fundadora del 'blog' 'Cool Hunter Diary', que dice: "Antes eran los diseñadores los que dictaban qué era tendencia, hoy la moda es el resultado del trabajo de la calle, las 'bloggers', las 'celebrities', las 'it girls' y, por supuesto, los diseñadores. La red ha revolucionado el 'cool system' y, gracias a ella, hoy son infinitos los actores capaces de crear tendencia".

La tendencia de la sostenibilidad

Los expertos esbozan las que serán o son ya las macrotendencias del mercado, las que mueven a las grandes empresas a pagar estudios e investigaciones a los cazadores de tendencia o 'coolhunters'. Entendidas como macrotendencias son aquellas que se visualizan a años vista y requieren de un estudio global más amplio. Entre ellas destaca la tendencia por la sostenibilidad y la responsabilidad social. "El consumidor cada vez más demanda transparencia en el proceso de producción de las empresas y marcas", explica Pilar Blazquez. Precisamente en ello se mueve no solo la moda, sino el mercado de la alimentación, puesto que el consumidor quiere evitar casos como el de Bangladesh o el del escándalo cárnico de McDonald's en China. Esta tendencia recibe el nombre de 'trazabilidad'.

Siguiendo esta tendencia surgen otras ramificaciones de la moda por lo sostenible, son la del 'do it yourself', el 'craft' – artesanía- o la personalización extrema de moda y accesorios. "Dotar de personalidad propia y autenticidad a los productos es la tendencia que imperará en los próximos años", explica Anna María López, especialista en diseño y tendencias y autora del libro 'Coolhunting digital, a la caza de las últimas tendencias'.

En el lado apuesto, aparecen las tendencias más extremas, aquellas que unen moda con tecnología. Las llamadas impresiones en 3D, sobre todo en calzado, o los 'wereables', que según Pilar Blazquez, "son productos como gafas, pulseras, relojes o prendas de vestir a los que añadimos uno o varios microprocesadores electrónicos que transmiten datos e interactúan con el usuario".

Nuevo feminismo y 'normcore'

Parecer normal es otra de las tendencias que imperarán el próximo año. Así lo descifraba la revista de moda ICON, en un artículo en el que ensalza el código de vestimenta de Steve Jobs, por ejemplo. Aquel que pasa desapercibido, es decir, el lado opuesto al 'hipster'.  Y del mal vestir pasamos al culto al feminismo. "El nuevo feminismo puede que se aplique cada vez más en prendas que no busquen tanto remarcar los atributos sexuales de la mujer, sino en jugar con todas sus formas", explica Elisabet Roselló, investigadora social y cultural, además de analista de tendencias y comunidades.

Elisabet señala también una apuesta por todo aquello local como una tendencia imperante. "Un reconexión por lo local y crítica a las grandes corporaciones, que puede tener diversas consecuencias, la más inmediata será el aprecio por la ropa hecha en el país", añade Elisabet.

Abrigos y pieles de colores

Moda pasajera o aquella que solo vemos un tiempo en las revistas, tiendas e internert es lo que llamamos microtendencia, la mayoría rompedoras y efímeras, además de reiterativas en el tiempo. De las pasarelas de Milán, París, Nueva York y Londres salen los esbozos de lo que se verá en las tiendas de marcas de lujo y las versiones de estas mismas en las tiendas 'low cost'. La 'blogger' Patricia Sañes señala como próximas tendencias "las pieles de colores, muchos flecos, 'animal print' en tonos intensos como el verde o naranja de Proenza Schouler, el 'arty print' de Jeremy ScottCarolina Herrera vuelve al cuello redondo de Audrey Hepburn y a los años 60, el estilo 'folk' de Ralph Lauren dicta sentencia y siguen de moda las plataformas XXL y los zapatos masculinos".

La revista 'Vogue' España ya avanzaba pistas con la portada de Blanca Suárez de este mes, donde la veíamos imitando el estilo de la inconfundible Jane Birkin, icono de los años 70 con sus 'shorts', minifaldas y el flequillo. También serán básicos las capas, ponchos, los pantalones 'palazzo' de los años 70, el charol de los 60, los abrigos o 'perfectos' sencillos al estilo 'normcore', el verde militar o las botas con mucho pelo. Patricia Sañes además añade un básico para anotar: "Un abrigo de piel en color indiscreto de la diseñadora británica Hannah Weiland. Sus abrigos ya arrasan entre las 'it girls' londinenses. ¡Ahora es el turno de las españolas!".