AUTOMOVILISMO

Fernando Alonso repite podio en Australia tras un final muy accidentado

El asturiano acaba tercero en una carrera ganada por Verstappen y en la que Sainz es sancionado por golpear el Aston Martin de su compatriota

Momento del accidente entre Sainz y Alonso en el desenlace de la carrera de Australia.

Momento del accidente entre Sainz y Alonso en el desenlace de la carrera de Australia.

Laura López Albiac

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Definitivamente el Mundial de Fórmula 1 se ha convertido en un show mediático de primer nivel, aunque sea a costa de polémica y extrañas decisiones por parte de la FIA. Hace dos semanas en Arabia, Fernando Alonso tuvo que esperar dos horas para añadir a su currículum su podio número 100 en el Mundial. Y ayer, en un caótico Gran Premio de Australia, el piloto asturiano encadenó el tercero consecutivo este año con Aston Martin, aunque también en esta ocasión hubo suspense hasta el final.

La carrera en Albert Park fue una absoluta locura, con tres banderas rojas y multitud de incidentes. Pero se resolvió en una insulsa última vuelta, tras el coche de seguridad. Max Verstappen, que a pesar de las circunstancias había sido el mejor de forma indiscutible, se anotó su segunda victoria de la temporada y afronta las tres semanas de paréntesis del campeonato (que regresará en Bakú del 28 al 30 de abril) al frente de la clasificación, ahora con un colchón de 15 puntos sobre su compañero Sergio Pérez.

El mexicano minimizó daños en un fin de semana para olvidar. Después sufrir un accidente el sábado en Q1 y cambiar la batería, centralita y suspensión de su Red Bull, tuvo que salir desde el pit lane y culminar una remontada que le dejó quinto en Melbourne..

Sorpresas de salida

Se esperaba una salida 'movida' en Australia y ha habido sorpresa a las primeras de cambio. Verstappen, que arrancaba en pole por segunda vez esta temporada, se ha visto superado por los dos Mercedes, tras una fantástica maniobra de George Russell, que se ha puesto al frente de la carrera. Charles Leclerc, muy agresivo, intentaba escalar desde la séptima posición de parrilla cuando se ha visto estorbado por Alonso, ha sufrido un impacto lateral de Lance Stroll y se ha ido a la grava. El monegasco ha tenido que retirarse mientras que su compañero Carlos Sainz, con un inteligente planteamiento de salida, había aprovechado la confusión para ganarle la posición a Fernando y situarse cuarto.

Tras Verstappen cruzó la meta Lewis Hamilton con un Mercedes que ya en la crono había dado señales de evidente recuperación. “Siempre se lamentan y quieren tirar su coche, pero ya son muy rápidos y van a más. A mitad de curso estarán peleando por las victorias”, había anticipado Alonso. No se equivocaba y ayer Russell y Hamilton fueron una pesadilla. En la salida adelantaron a Verstappen y antes de que la carrera derivara en una sucesión de accidentes y banderas, ambos mostraron el potencial del W14.

Desesperación de Sainz

Se esperaba una salida ‘movida’ en Australia y hubo sorpresa. Leclerc, que partía séptimo, intentó esquivar a Alonso, se llevó el impacto lateral de Stroll y terminó en la grava. Carlos Sainz, con un inteligente planteamiento pudo situarse cuarto, por delante de Fernando. Tras unos minutos en régimen de safety car la acción se reanudó con Russel al frente. Y llegó el segundo ‘golpe de teatro’.

Un accidente de Albon (Williams) dio paso a otro coche de seguridad virtual, que Russell y Sainz aprovecharon para hacer su pit stop. La bandera roja desplegada justo en este momento les pilló a contragolpe. ¡Noooo! gritaba Carlos, relegado a la undécima posición en la resalida, mientras Russell bajaba a la séptima y Hamilton 'heredaba' el liderato por delante de Verstappen y Alonso.  

Tras doce vueltas Verstappen lanzó un ataque fulminante, adelantando a Hamilton por el exterior. Russell presionaba para volver a la batalla cuando su W14 empezó a arder por un fallo de motor que le dejaba fuera de combate. Un inmerecido final. "Cuando no es tu día, no es tu día", asumió el inglés, resignado.

Final de 'infarto'

Un accidente de Magnussen (Haas) en el tramo final inundó la pista de restos de su monoplaza. Dirección de carrera mostró la segunda bandera roja del día, decretando después una carrera reducida a solo dos vueltas, un desenlace de alta tensión, con todos a ‘cuchillo’ , que tuvo las peores consecuencias. Sainz no acertó en la resalida y se llevó por delante a Alonso. No fueron los únicos en el lío, con varias salidas de pista y un aparatoso accidente de los Alpine que acabó con Gasly y Ocon contra el muro.

La tercera bandera roja llegó antes de completar el primer sector. Y Alonso , siempre atento, sentó cátedra: “¡Qué norma estúpida es esta! ¡Chequead rápido! ¡Revistarlo todo! ¡Hace un año en Silverstone pasó lo mismo y todo se reinició!", avisó por radio. "El coche está bien. Yo puedo seguir. Pero mirad eso. Miradlo", insistió. Tenía razón. Dirección de carrera estudió el reglamento y anunció que mantenía las posiciones. Es decir, Alonso conservaba el tercer puesto, tras Verstappen y Hamilton, a los que acompañó en el podio.

La otra cara de la moneda fue para Carlos Sainz, que se desesperó cuando le comunicaron una sanción de 5 segundos por su incidente con Alonso. “La más injusta de mi vida”, dijo Carlos, que intentó convencer sin éxito a los comisarios. “No merecezco quedarme sin puntos”, lamentó el madrileño. Su maniobra debía ser castigada, pero tener que cumplirla tras el coche de seguridad le hundió hasta la 12ª posición.inal. Mientras, Verstappen ampliaba su ventaja por encima de los 10 segundos, pero detrás de él se libraba una intensa batalla por el podio, con cinco pilotos en un 'pañuelo.

“Ha sido una montaña rusa de emociones. En la última media hora ha pasado de todo y era muy difícil de entender este final”, analizó Alonso. “Tuvimos suerte; Yo tercero y Lance cuarto, es un domingo increíble para el equipo”. El asturiano se despidió de Australia, donde hace 22 años inició su carrera en la F1, con una recriminación a la FIA: “Ha sido bueno para el espectáculo, pero tal vez nos estamos pasando un poco de la raya”.