MUNDIAL DE MOTOGP

Márquez: "Llevo muchos años luchando contra un muro"

El campeón catalán, que ayer reconoció estar pasando "el peor momento de mi carrera deportiva", soportó los dolores en la prueba de ayer al 'sprint', cuando acabó 17º, pero ha decidido no forzar en la carrera larga de este mediodía

"Se acabó eso de que tenemos que ganar porque pilotamos una Honda. Ganaremos cuando tengamos una moto competitiva. Cuando vuelva en Silverstone, me lo tomaré de otra manera", afirma el ocho veces campeón del mundo

Marc Márquez

Marc Márquez / Alejandro Ceresuela

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

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Tres horas y media después de anunciarse que Marc Márquez no correrá tampoco hoy en Assen (Países Bajos), el campeonísimo del equipo Repsol Honda afrontó una conferencia de prensa en la que volvió a reconocer que estaba en el peor momento deportivo de su carrera, pero dijo que estaba en su mejor momento personal y que, con la ayuda de su familia, de su hermano Àlex, de su pareja, de su manager y de su equipo va a darle la vuelta a la situación. “Primero he de recuperarme física y anímicamente y, luego, afrontar, de nuevo, las carreras con otras perspectivas, que, de momento, no es ganar, desde luego, porque con esta moto no se puede ganar, ni acabar entre los 10 primeros de cada gran premio”.

Contando los numerosos problemas que ha vivido honda en los últimos tres años (“llevamos así desde el 2020”), Márquez reconoció que si los mejores pilotos no han sido capaces de ganar con esta moto, es evidente que el problema es la moto, es el proyecto. “Llevo muchos años luchando contra un muro y, aunque no está en mi mano decidir nada, espero que Japón se de cuenta de la situación que estamos atravesando”.

La realidad es clara

“No puedes ocultar la realidad”, empezó comentando Márquez en la conferencia de prensa en la carpa del equipo Repsol Honda. “Es evidente que hay una prueba casi irrefutable, por aquí han pasado grandes pilotos como Pedrosa, Lorenzo, mi hermano Àlex, Pol Espargaró, Joan Mir y ninguno ha podido conseguir buenos resultados. Si campeones de ese nivel no han ganado, es evidente donde está el problema. Es más, ahora estamos tres de los cuatro pilotos oficiales lesionados, yo, Mir y Rins. Por tanto, ese es un síntoma y está claro cuál es el motivo de esta situación: la moto”.

"Si campeones como Pedrosa, Lorenzo, Pol Espargaró, mi hermano Àlex, Mir o Rins no han ganado, es evidente donde está el problema"

— Marc Márquez / Piloto oficial del equipo Repsol Honda

Cuando le recordamos que Alberto Puig, Team Manager del equipo Repsol Honda, acababa de reconocer que Honda llevaba mucho retraso sobre las fábricas europeas, Ducati, Aprilia y KTM, en ideas, aerodinámica, tecnología y demás, Márquez se mantuvo tan sincero como siempre: “Mi obligación es seguir trabajando para aportar la mejor información a los ingenieros japoneses. Este año llegué a Portimao, a la primera carrera, mejor que nunca y es, en esa situación, cuando intentas hacer más de lo que debes y ocultar la realidad, que no es otra que estamos luchando contra un muro. Hace años que luchamos contra un muro”.

Márquez insistió en definir su actual situación, personal y profesional. Y hasta de proyecto. “Asumí muchos riesgos y han venido caídas y lesiones, demasiadas. Este mes y medio de vacaciones me viene como anillo al dedo. Necesito parar, reconstruirme anímica y físicamente, rodeado de todos los míos, mi familia, mi hermano Àlex, mi equipo, mi pareja, mi manager, mis amigos, en los que me apoyo en los momentos más difíciles, en eso, desde luego, soy muy afortunado y volver con fuerza en Silverstone, pero midiendo, incluso allí, el regreso con la competición”.

"Con esta Honda no se puede aspirar a terminar ni siquiera entre los 10 primeros. Cuando vuelva a pilotarla, lo haré sin asumir tantos riesgos"

Cuando le preguntamos qué más tenía que ocurrir para que tomase la decisión de su vida, es decir, para que se plantease abandonar el equipo de siempre, Honda, el ocho veces campeón del mundo comentó: “Tiene que pasar el tiempo, porque una de las cosas que me han enseñado es a no decir palabras inadecuadas ni, mucho menos, tomar decisiones en caliente. Ahora necesito estas vacaciones y recuperarme del todo. Eso sí, se ha terminado eso de que porque pilotemos una Honda se tiene que ganar. Cuando tengamos una moto para ganar, intentaremos ganar. Ahora no se puede pelear ni siquiera por acabar entre los diez primeros de cada gran premio. No quiero asumir tanto riesgo, no”.

Alberto Puig afrontó ayer, en Assen (Países Bajos), la crisis de Honda.

Alberto Puig afrontó ayer, en Assen (Países Bajos), la crisis de Honda. / EMILIO PÉREZ DE ROZAS

Sobre la resistencia de Honda, Japón y el departamento de competición de la firma alada (HRC) a contratar ingenieros o técnicos externos, europeos, para su nuevo proyecto, Márquez lanzó pelotas fuera “pues nada de todo eso es cuestión del piloto”. “Es, sí, un tema delicado, pero que no debe decidir ni preocupar a un piloto. Sí me preocupo por el proyecto, sí he hecho reuniones sobre cómo avanzar el proyecto, por ejemplo, el pasado año, en Austria, pero el piloto lo piloto con todo lo que traen a probar. Y, de momento, ayer corrí con la moto de Portimao, porque nada de lo que han traido ha funcionado. Son los ingenieros japoneses y HRC quien debe decidir”.

"No tengo una bola de cristal. No sé qué ocurrirá en el futuro, pero Honda no retendrá a quien no quiera estar en su equipo"

— Alberto Puig / Team Manager del equipo Repsol Honda

Puig, por su parte, reconoció que parece que la información de los ingenieros y responsables técnicos japoneses que están en el circuito, en las carreras, que viven en el equipo, no llega de la mejor manera a Japón. Y, desde luego, el Tam Manager del equipo Repsol Honda sí reconoció que el retraso de Honda respecto a las marcas europeas es grande.

Y lo más importante, lo más comentado, la posibilidad de que Márquez se esté planteando dejar Honda a finales de año, pese a tener aún un año más de contratio, Puig también fue muy sincero: “Tiene contrato con nosotros. Nadie aquí se plantea la posibilidad de que Marc nos deje. Desde luego, tiene razones para no estar feliz, pero yo no tengo una bola mágica que me diga lo que puede pasar. Una cosa está claro, Honda no suele retener a quien no quiere estar en su equipo”.

Baja de última hora

El equipo Repsol Honda acaba de anunciar, a las 09.04 de hoy, que su piloto Marc Márquez, ocho veces campeón del mundo, no tomará parte, a las 14.00 horas (DAZN), en la carrera larga del Gran Premio de los Países Bajos, que se celebra en el precioso trazado de Assen, donde ayer se superó el récord de asistencia de los sábados, con casi 50.000 espectadores.

El comunicado del equipo es muy escueto: “Marc Márquez no participará en el Gran Premio del TT Circuit de Assen tras ser declarado no apto como consecuencia de las lesiones sufridas en el GP de Alemania la semana pasada, que se han agravado aún más en Assen”. De esta manera, se repite la ausencia del piloto de Cervera (Lleida), por segundo domingo consecutivo, ya que MM93 ya no estuvo en la carrera de Sachsenring, que se celebró, el pasado domingo, en Alemania, debido a que sufrió cinco caídas en tres días.

Márquez, que ayer reconoció estar pasando el peor momento de su exitosa carrera deportiva (“si exceptuamos, claro, los dos años y medio últimos de lesiones, operaciones y recuperación”) se quejó ayer, tras la prueba al ‘sprint’, donde obtuvo el peor resultado de su vida, en 160 grandes premios, al acabar el 17º, que le dolía “muchísimo” la segunda costilla que tiene fracturada, por culpa de la caída en el ‘warm-up’ (entrenamiento previo a la carrera) del pasado domingo en Alemania.

"Yo nunca había corrido con una costilla fracturada y la verdad es que es casi imposible pilotar en condiciones cuando sufres una lesión así". Todo parece indicar que la lesión que le impide correr, hoy, en la ‘catedral’ del motociclismo, es esa fisura y no la pequeña fractura que sufre en su pulgar izquierdo o los problemas serios de su tobillo derecho "pues esas dos lesiones son perfectamente soportables sobre la moto".

Márquez, muy afligido

Quienes lo conocen bien dicen que jamás, nunca, lo han visto tan preocupado. No hundido. Ni derrotado. No, nada de derrotado, él jamás se vence. Es como los juncos, se doblan pero no se rompen. Tristón, inquieto, turbado, apenado por lo que le ocurre. Taciturno al no ver el final del túnel, técnico, de Honda, de la moto, de su RC213V. Y, sobre todo, atribulado. Su caída en la ‘quali’ de ayer, al embestir por detrás a Enea Bastianini por ir despistado, demuestra hasta qué punto Marc Márquez Alentá está, a sus 30 años, desencantado con la situación que está viviendo después de dos años y medio de viacrucis, lesiones, operaciones y rehabilitación que no quisiera para su peor enemigo.

Así que sí, era el momento de acercarse al ocho veces campeón del mundo, mientras se acariciaba el pectoral, bajo su hombro derecho, para masajearse la zona de la segunda costilla fracturada (“jamás he sentido un dolor así de punzante, porque jamás he corrido con una costilla rota”) para preguntarle si era el peor momento de su espléndida, extraordinaria y casi única carrera deportiva. “Pues sí, lo es. Bueno, claro, si exceptuamos los dos años de lesiones y operaciones, este es el peor momento, sí, por mucho. Y no pienso esconderlo ni esconderme. Lo voy a afrontar con la entereza que lo afronto todo, lo bueno, lo buenísimo y lo malo”.

Llueve sobre mojado

“Psicológicamente es, sin duda, el peor momento”, continuó explicando, repito, sin la sonrisa de siempre. “Parece que llueve sobre mojado. Lo intento y no sale. Me caigo. Me lesiono. Pero ¿sabes qué pienso?, que es como cuando uno tiene un mal día y piensas que el siguiente será mejor. O el otro. O el otro. Esa es, incluso ahora o, mejor, ahora más que nunca, es mi mentalidad. Derrotarse sería lo más fácil y ya sabéis todos que lo fácil no me gusta y jamás escogeré ese camino, ¡jamás!”

Ese ¡jamás! no solo ha sonado redondo sino que, vista su trayectoria, ha resonado como muy real. “En los momentos difíciles no tiras de motivación, tiras de fuerza de voluntad, sacrificio, constancia, rutinas. Ahora toca volver a casa, trabajar en la recuperación, pues hay mucho que recuperar para presentarme tras el parón de julio, en Silverstone (Inglaterra), en el mismo estado de forma, más que excelente, que estuve en Portimao (Portugal) en el inicio de temporada”. Eso sí, Márquez quiere desconectar unos días “que también me vendrá bien”.

"Derrotarse ahora sería lo más fácil, pero ya sabéis que lo fácil no me gusta y junca escogeré ese camino, ¡jamás!"

— Marc Márquez / Piloto oficial del equipo Repsol Honda

Márquez, que ayer acabó 17º, su peor clasificación en 160 grandes premios en MotoGP, reconoció que, en Assen, está corriendo porque el piloto es el primero que ha de dar ejemplo. Corre para él. Pues ni la moto ni él están para competir, como ya señaló en Sachsenring (Alemania). “He corrido rondando en tiempos de piloto probador, es decir, medio segundito más lento por vuelta y, cuando he encontrado un grupito que iba a mi ritmo, me he quedado ahí y he acabado tranquilamente la carrera”.

Márquez jamás ha engañado a nadie, por eso reconoce que si la semana que viene hubiese otro gran premio, no lo correría. No es que corra por orgullo, “¿por tus narices?”, como le preguntó otro periodista. “No, no, corro para el equipo porque es lo que llevo haciendo durante todo este año intentando aportar mi granito de arena para superar el bache que vivimos. El piloto tiene que ser el primer honesto con el equipo y su fábrica”.

¿Pedir perdón?

Todo el mundo está muy preocupado en el seno del mejor equipo del mundo, el Repsol Honda, en el interior de la fábrica más victoriosa de todas, Honda, en la familia más campeona de todas, pero todo, todo, está en manos de los que menos hablan, de los muditos ingenieros y jefes japoneses que aún no han abierto la boca.

Marc Márquez, ayer, en la carrera al 'sprinti' junto a su compañero en Honda, Takaaki Nakagami.

Marc Márquez, ayer, en la carrera al 'sprinti' junto a su compañero en Honda, Takaaki Nakagami. / ALEJANDRO CERESUELA

Hace ahora exactamente cinco años (Spielberg, Austria, agosto del 2018), la firma Yamaha, que ayer volvió al podio con Fabio Quartararo (3º tras las Ducati de Marco Bezzecchi y ‘Pecco’ Bagnaia) pedía públicamente perdón a sus pilotos, especialmente al mítico Valentino Rossi, en una comparecencia de Kouji Tsuya, Director Técnico de la firma de los diapasones. “Queremos pedir perdón a nuestros pilotos por el pobre rendimiento de la moto que pilotan”. Fue una manera de hacerse el ‘harakiri’ en público.

El japonés Tetsuhiro Kuwata, Director Técnico de HRC, el departamento de competición de Honda, no ha abierto la boca desde hace meses. Y nadie sabe, ni intuye, pues con los japoneses todo es un misterio, qué está ocurriendo en Japón. De ahí que la inquietud en el seno del equipo Repsol Honda sea profunda, inmensa. Y eso, conociendo a Marc Márquez, aún añade mayor inquietud en la mente del ocho veces campeón del mundo, que siempre ha mimado a su familia del ‘paddock’.