Baleares tira la toalla en la lucha contra la 'Xylella fastidiosa'

Una delegación de técnicos de la Unión Europea visitó las islas Baleares  islas Baleares y elaboró un informe que verá la luz en breve pero cuya línea maestra ya se conoce: allí la batalla está perdida. Con tres islas afectadas, varias especies vegetales infectadas y tres subespecies diferentes de ‘Xylella’ detectadas no hay forma de erradicar la plaga. Talar todos los árboles a los que ‘condena’ el plan europeo no asegura acabar con ella. Por eso, previsiblemente, se aceptará la propuesta del Gobierno balear de que se trituren solo los árboles infectados y afrontar una restructuración del sector con resiembras en cuatro años, aunque eso suponga que se mantenga la prohibición de que salga de ‘ses Illes’ material vegetal.

La Generalitat valenciana apunta que no son casos comparables. “La primera diferencia es la extensión, pues allí está en todas las islas excepto en Formentera. Además, allí hay muchas más especies afectadas, no solo almendros como aquí, y hay tres subespecies de la bacteria, mientras que nosotros solo tenemos una. Eso obliga ya a un enfoque diferente. Además la insularidad les permite aislarse por sí mismos. Y hay que tener muy en cuenta que el peso que para Baleares supone el comercio de plantas es mucho menor que en el nuestro”, señala Elena Cebrián, 'consellera' valenciana, que se muestra abierta a cambios en el plan a aplicar si así lo deciden “la Comisión Europea y el ministerio" pero siempre "con respaldo científico”. Ahora mismo no lo ve probable “porque el resultado de esta política se va a ver aquí en Alicante porque en Italia no dio tiempo a aplicarla y tampoco ha sido posible en Baleares y Córcega”.

Pero los agricultores no ven viable un plan que creen que copia el de Estados Unidos. “No se puede pretender hacer aquí como allí que son todo grandes extensiones. Aquí todo son parcelas pequeñas”, recuerda Carmen Solbes, que llevaba tres décadas al frente de la primera parcela afectada. Para ella la opción pasa por triturar los árboles afectados y tratar el resto con insecticidas más potentes. Y, como todos, advierte de que no hay frontera que frene esta expansión. “Si entra en Murcia y Andalucía, apaga y vámonos. Piensan que por triturar los campos de cuatro abuelos lo solucionan y no es así”, señala. De momento la Junta de Andalucía ha anunciado la creación de un laboratorio contra la ‘Xylella’ en Córdoba. Por eso Cebrián pide al Ministerio de Agricultura que no se ponga de perfil. “Pedimos mucha colaboración en su trabajo de coordinación, debe ser una cuestión de Estado”, remarca.