Las administraciones que más millones de euros reparten en la Lotería de Navidad

La Bruixa d'Or es uno de los lugares de referencia para comprar un décimo de la Lotería de Navidad. A pesar de su localización, en el Pirineo catalán, es la administración de loterías que más décimos vende de todo el país cada año. De hecho, el 86% de las ventas son 'online'. Su propio nombre ya es un presagio de lo que puede suceder. Hay otro elemento en juego: el fundador y propietario de la administración de Sort (Lleida), Xavier Gabriel, ha repartido tantos millones de euros desde los años 80 del siglo pasado por un motivo: compra muchos números a la SELAE y, por tanto, la estadística le es favorable.

La historia de la Lotería de Navidad también está estrechamente ligada a la administración de Doña Manolita. Su primer negocio fue un estanco en la Calle Hortaleza de Madrid. Pero no fue hasta 1904, con 25 años, cuando doña Manolita abrió la Administración número 67 en la calle San Bernardo de la capital del Estado. Empezó a repartir premios con bastante frecuencia, lo que le permitió expandir el negocio y, sobre todo, ganar solera. En más de un siglo, ha repartido el Gordo más de 76 veces. Manolita murió en 1951. Pese a su ausencia, las largas colas, ahora en la calle del Carmen 22 de Madrid, ya forman parte de la historia de la lotería de este país.

Lotería Valdés ha repartido millones desde sus inicios en numerosos premios Lotería de Navidad. Comenzó su andadura en 1905 y dio su primer Gordo en 1906, solo un año después de su inauguración. Esta administración está ubicada en la Rambla de Barcelona y ha repartido el Gordo de Navidad hasta en 7 ocasiones, la última de ellas en 1988. Dispone de unos 2.500 números distintos y cada año vende unos 50.000 décimos.

En Bilbao se encuentra la Lotería Ormaechea, otra de las administraciones de lotería con más suerte del país. Fundada en 1941, actualmente se encuentra en la calle Alameda Urquijo 52. Esta administración entregó el Gordo de Navidad en 1986 y en el sorteo extraordinario de 2018 vendió 10 décimos de un quinto premio.

Manises es una de las localidad más afortunada de España en lo que a Lotería de Navidad se refiere. Su administración de loterías, Lotería Manises, ha entregado el Gordo en 1971, 1986, 2012, 2013 y 2018. Manises es el municipio español donde más veces ha tocado el famoso Gordo de la Lotería de Navidad: los vecinos de este pueblo de 30.000 habitantes han ganado más de 300 millones de euros a lo largo de los años.

El Gato Negro es una de las administraciones que más premios ha repartido en los sorteos de la Lotería de Navidad desde su fundación en 1912. Situada en Barcelona, en el número 1 de la calle Pelai, repartió el segundo premio del Sorteo Extraordinario de Navidad en 1938 y en 1951. En 1953 entregó el tercer premio, pero la suerte volvió a esta administración en el nuevo milenio, repartiendo varios premios Lotería de Navidad en 2003, 2004, 2010. En 2017 entregó parte del quinto premio.

Se llama Lotería Sagasta Los Millones por una única razón: ha repartido muchos millones en su siglo de historia, valga la redundancia. Esta administración de Sevilla, situada en la calle Sagasta 13, abrió sus puertas en 1919 y ha repartido dos Gordos en el sorteo de la Lotería de Navidad, uno en 1961 y otro en 1998.

Junto con Doña Manolita, La Pajarita es otra de las administraciones más emblemáticas de Madrid y una de las que más suerte ha repartido en toda su trayectoria. Abrió sus puertas en 1925 en el número 6 de la Puerta del Sol, aunque muchos afirman que fue mucho antes. En 1944 y 1961, La Pajarita repartió los tres primeros premios del sorteo extraordinario. Además, en 1991 volvió a entregar el Gordo. En la actualidad se encuentra ubicada en la calle Alcalá número 18.

La administración de loterías El Doblón de Oro, en Madrid, fue inaugurada en 1950. En 2006 repartió más de 180 millones de euros con el segundo premio, el mayor cantidad otorgada por un punto de venta madrileño. Un año después, entregó 91,5 millones con el tercer premio del sorteo extraordinario de Navidad. Cualquier décimo tiene suerte, pero el de estas administraciones quizás un poquito más.