Meteorología extrema

La tormenta tropical Hilary descarga lluvias torrenciales en California

Casi un millar de personas permanecen desaparecidas tras los incendios en Maui

Inundaciones en baja California.

Inundaciones en baja California. / Yannick Peterhans / Zuma Press

EFE

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La tormenta tropical Hilary descargó lluvias récord a su paso por el sur del estado de California, en el oeste de Estados Unidos, lo que obligó a cerrar escuelas, carreteras y negocios antes de llegar a Nevada el lunes. Unos 17 millones de personas estaban este lunes bajo aviso de inundaciones y fuertes vientos.

El gobernador del estado, Gavin Newsom, había declarado el sábado el estado de emergencia en gran parte de esta área típicamente seca, donde las advertencias de inundaciones repentinas estuvieron vigentes hasta este lunes.

El Servicio Meteorológico Nacional informó durante la noche del domingo que se habían batido varios récords diarios de precipitaciones en la región. Hilary descargó un diluvio que inundó diversas carreteras transformándolas en ríos y dejando varados a algunos automovilistas.

Cuando la población local ya estaba nerviosa antes de la llegada de la tormenta, un terremoto de magnitud 5,1 sacudió la ciudad de Ojai, en el sur californiano, aunque no se registraron daños ni víctimas.

El inicio del año escolar público se retrasó un día, con clases pospuestas en distritos como San Diego, Los Ángeles, Pasadena y Palmdale.

Hilary, que en su apogeo fue un huracán de categoría 4 -el segundo más poderoso en la escala de cinco niveles de Saffir-Simpson-, fue degradada a tormenta tropical cuando cruzó desde México a Estados Unidos y luego su categoría pasó a la de ciclón postropical.

Nevada, Oregón y Idaho

Este lunes el núcleo de Hilary se ubicó en Nevada, donde se esperaba que se moviera rápidamente. La lluvia también se extendió a los estados de Oregón y Idaho, según el último reporte del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.

Se seguían esperando "inundaciones localmente catastróficas y potencialmente mortales" en partes del suroeste de los Estados Unidos, agregó la entidad. La tormenta se movía a un ritmo acelerado de 55 kilómetros por hora, con algunas ráfagas más fuertes.

Las autoridades de California abrieron cinco refugios y se desplegaron más de 7.500 personas, incluidos varios cientos de soldados de la Guardia Nacional y equipos de rescate de aguas rápidas, según la oficina del gobernador. Además, unos 400 vuelos fueron cancelados o retrasados en los aeropuertos de la zona.

Una de las poblaciones más azotadas por la tormenta fue Palm Springs, donde vídeos difundidos en las redes sociales mostraban las calles inundadas. También resultó afectada Los Ángeles, con vías anegadas de agua y árboles y líneas de luz caídas.

En áreas desérticas, se registraron acumulaciones de agua de entre 12 y 25 centímetros, la misma cantidad que se registra en todo un año.

En San Diego, la gente llenó sacos de arena para prepararse para una posible inundación, mientras que los socorristas advirtieron a la gente que se mantuviera alejada del mar.

Un muerto en México

Más al sur, en el vecino México, una persona murió después de que un vehículo fuera arrastrado por la crecida de un río, según Protección Civil de México, que advirtió sobre deslizamientos de tierra y cierres de carreteras en el estado de Baja California.

El Ejército mexicano abrió 35 albergues que brindan refugio a 1.725 personas afectadas por la tormenta

Los científicos han advertido que las tormentas se están volviendo más potentes a medida que avanza el calentamiento debido al cambio climático.