La UE está "perdiendo la paciencia" con Serbia y Kosovo, advierte Borrell

La Unión Europea empieza a perder la "paciencia" ante el aumento de las tensiones y la confrontación entre Serbia y Kosovo. "La situación requiere de un movimiento inmediato, requiere desescalada y buscar una solución urgentemente. Los Estados miembros están de acuerdo en esta urgencia y están perdiendo la paciencia ante una situación que sigue deteriorándose", ha advertido este martes el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell, durante una breve intervención ante la prensa junto con el primer ministro albanés Edi Rama. 

Borrell se reunió la semana pasada, de urgencia y por separado, con el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, y el presidente serbio, Aleksandar Vucic, aunque el diálogo sigue sin fluir y la preocupación crece en las capitales europeas por la falta de avances. Hasta el punto de que el asunto se colará previsiblemente en la agenda de la cumbre de líderes europeos que se celebra este jueves y viernes en Bruselas. La UE lleva semanas pidiendo a Prístina y Belgrado que celebren nuevas elecciones de forma inmediata en los cuatro municipios del norte de Kosovo en los que han surgido las tensiones a raíz de la toma de posesión de los nuevos alcaldes albanokosovares. 

Fueron elegidos en abril, con una participación total de solo el 3%, en unos comicios boicoteados por la minoría serbia. "Deben organizarse elecciones en los cuatro municipios del norte, con la participación incondicional de los serbios de Kosovo en las mismas y ambas partes deben mostrarse dispuestas a cumplir sus obligaciones del diálogo", recordaba este lunes Borrell avisando de que los Veintisiete están dispuestos a adoptar nuevas medidas, financieras o políticas, si no se observan avances para destensar la situación y Kurti y Vucic cumplen con su compromiso de convocar nuevas elecciones.

Medidas políticas y financieras

"Podemos considerar medidas políticas para limitar los contactos políticos, así como medidas financieras que sea proporcionales y reversibles", decia el lunes Borrell que recordaba que no es posible tener a alcaldes en funciones protegidos constantemente por las fuerzas de la OTAN. "No es una opción sostenible. Deben ser sustituidos mediante elecciones, nuevas elecciones. Ambas partes han acordado esto, pero es necesaria la participación de los serbios, de lo contrario tendremos la misma situación", añadía el político español

La sensación entre los diplomáticos europeos es que "estamos peor que nunca" y que cuando creían superado lo peor de la "crisis" con dos territorios candidatos a la adhesióesta vuelve a resurgir con fuerza. "Ha habido incidentes muy graves y hay una situación institucional peligrosa", reconocen fuentes implicadas en la mediación con Prístina y Belgrado que insisten en que cada parte cuenta su versión de la historia y que es necesario "no ponerse a escarbar sino buscar una solución".

Desescalada y diálogo

A las voces que piden contención y soluciones se ha sumado también la de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que además de reunirse también con Rama en Bruselas ha mantenido sendas conversaciones este martes tanto con Kurti como con Vucic, según ha anunciado en sus redes sociales. Durante su conversación con el dirigente albanokosovar, la alemana ha hecho hincapié "en la necesidad urgente de la desescalada y el regreso al diálogo facilitado por la UE sobre la normalización de las relaciones con Serbia". Mismo mensaje al dirigente serbio a quien le ha pedido que haga "todo lo posible para apoyar el regreso al diálogo" y el papel de Serbia en la reducción de las tensiones en el norte de Kosovo.

También Rama, de visita en Bruselas se ha pronunciado sobre esta crisis política, que afecta a la estabilidad de toda la región y cuyos "efectos devastadores" podrían dejarse notar en caso de deterioro en toda la región. El dirigente albanés apoya por eso una conferencia al más alto nivel que reúna "a los líderes de ambas partes y a sus equipos con los equipos de la Unión Europea y de Estados Unidos" y de la que "no se vayan sin llegar a un acuerdo". Según el mandato albanés, ahora es el momento de buscar una solución. "No podemos dejar que todo esto se desmorone como un castillo de arena por culpa de unos avances absolutamente absurdos basados en pretensiones totalmente absurdas", ha añadido