La OTAN exige a Kosovo que reduzca la tensión con Serbia

La OTAN ha exigido a las autoridades de Kosovo que reduzcan las tensiones con Serbia, un día después de que alcaldes de origen albanés intentaran tomar posesión de alcaldías en localidades de mayoría serbia en el norte del país. "Instamos a todas las instituciones en Kosovo a desescalar inmediatamente y a todas las partes a resolver la situación a través del diálogo", ha urgido la portavoz de la Alianza Atlántica, Oana Lungescu.

Los enfrentamientos entre la policía kosovar y los manifestantes de origen serbios opuestos a que alcaldes de etnia albanesa tomasen posesión empujaron al Gobierno de Belgrado a poner a su Ejército en estado de alerta y a trasladar unidades militares más cerca de la frontera común. En un intento de prevenir un enfrentamiento entre ambos países, Lungescu ha declarado que los 3.800 integrantes de la Fuerzas de Kosovo (KFOR, la misión de mantenimiento de paz liderada por la OTAN) estarían vigilantes.

Una década después del final de la guerra, el Gobierno de Kosovo proclamó la independencia en 2008, un movimiento no aceptado por la minoría serbia que habita en el norte del país y que sigue considerando a Belgrado su capital. Los albanos étnicos constituyen el 90% de la población, mientras que los serbios conforman el 10% restante y residen fundamentalmente en el norte del país.

Advertencia de Blinken

La advertencia de la OTAN viene precedida de declaraciones en el mismo sentido pronunciadas por el secretario de Estado de EEUU Anthony Blinken. "Condenamos fuertemente las acciones del Gobierno de Kosovo que están disparando la tensión en el norte y crean inestabilidad", había dicho. El desencadenante de los problemas actuales fueron las elecciones municipales celebradas en abril. Lista Serbia, el principal partido de la comunidad homónima, optó por boicotear los comicios, en protesta por la marginación que aseguraban estar sufriendo a manos de la mayoría albanesa. La guerra de Ucrania y la tensión entre Occidente y Rusia, país con importantes vículos religiosos y culturalks con Serbia, ha azuzado la tensión en esta región de los Balcanes.